Tiroteo en Ucrania provoca varios muertos y aumenta la tensión en la zona
El misterio rodea el tiroteo en una carretera en el este de Ucrania que dejó varios muertos y aumentó las tensiones en la región, en donde grupos prorrusos se han tomado edificios gubernamentales y han puesto retenes desafiando a las autoridades de Kiev.
En las primeras horas del domingo, según reportaron grupos prorrusos en Slaviansk, uno de sus retenes en el oeste de la ciudad fue atacado. Dijeron que tres o cuatros vehículos se acercaron y sus ocupantes abrieron fuego contra las barricadas.
Los manifestantes prorrusos le dijeron a CNN este domingo que durante el ataque pudieron apoyo, y hombres armados llegaron a enfrentar a los atacantes. Dos autos quemados aún están en el lugar, y uno de ellos tiene agujeros de bala.
Ambos bandos dieron declaraciones distintas sobre el número de fallecidos.
La nueva administración prorrusa en Slaviansk dijo que seis personas murieron en el tiroteo.
Un comunicado en el sitio web del Ministerio del Interior dijo que cuatro autos con ocupantes desconocidos se acercaron al retén en la entrada de la ciudad y abrió fuego a las personas en las barricadas, y que el fuego fue respondido.
Tres personas murieron y otras tres resultaron heridas, dice el comunicado. Dos de los heridos recibieron atención médica pero se negaron a ser enviados al hospital.
Había cerca de una docena de personas en dos autos que salió del lugar en dirección a la región de Járkov, según el comunicado, y otros dos coches fueron incendiados y destruidos.
CNN no ha podido confirmar la cifra de muertos. Los esfuerzos para contactar al hospital en Slaviansk no fueron exitosos. Pero líderes prorrusos en Slaviansk colocaron un cuerpo frente al edificio de Seguridad del Estado en esa ciudad, que ocuparon por una semana.
Dijeron que el cuerpo es de uno de los presuntos atacantes.
La tensión se ha incrementado en los últimos días en el este de Ucrania, sobre todo en la región de Donetsk, donde los separatistas prorrusos han tomado los edificios de gobierno y de la policía en hasta 10 pueblos y ciudades.
Tanto el gobierno de Kiev, como Occidente, acusan a Rusia de desestabilizar la región como un pretexto para enviar potencialmente tropas y proteger a la población de habla rusa local.