Zelenski dijo que hay que prestar "especial atención a los sistemas Patriot", las costosas baterías antiaéreas de diseño estadounidense, eficaces contra estos misiles.
Ucrania recibió por primera vez un sistema Patriot en septiembre de este año, más de tres años de conflicto después. Zelenski afirmaba entonces que recibiría dos sistemas más en otoño de este año.
En abril, el diario New York Times, citando fuentes oficiales estadounidenses, afirmó que Israel pensaba devolver uno de sus sistemas Patriot, que luego sería enviado a Ucrania, porque el ejército israelí quería dotarse de material más moderno.
Taiwán, ante las amenazas chinas, ha construido sostenidamente su capacidad defensiva en los últimos años, con grandes compras de armas —como el sistema Patriot— y el aumento de su presupuesto de defensa para invertir en reformas militares y la fabricación de armas.
Falta de suministros
El Pentágono rechazó un informe de The Guardian de junio que afirmaba que Estados Unidos solo cuenta con alrededor del 25% de los interceptores Patriot que necesita.
“El ejército estadounidense tiene lo necesario para luchar y ganar cualquier misión, en cualquier lugar y en cualquier momento”, dijo el portavoz del Departamento de Defensa, el teniente coronel Byron McGarry, a Business Insider.
Sin embargo, un análisis del Centro para Estudios Estratégicos e Internacional (CSIS) muestra que la reconstrucción de los inventarios estadounidenses para algunos sistemas proporcionados a Ucrania llevará años.
“Para Estados Unidos, la demanda en estos escenarios a menudo supera la capacidad industrial actual, lo que sugiere la necesidad de una reimaginación significativa de las reservas y las capacidades de aumento”, indica un análisis de Cinthia R. Cook, investigadora en el departamento de defensa y seguridad del CSIS.