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López Obrador, el candidato que hace campaña en vuelos de clase turista

Mientras viaja en vuelos comerciales el candidato aprovecha para buscar electores: fotos, saludos y sonrisas en los pasillos del aeropuerto
mar 17 abril 2012 11:30 AM

Son las 7:00 de la mañana en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, y por el pasillo que lleva a una de las salidas internacionales se escucha una ola de murmullos mientras la gente gira la cabeza en busca de Andrés Manuel López Obrador, el aspirante presidencial que viaja en clase turista.

El político tabasqueño no trae equipaje de mano, camina con soltura y con una sonrisa, acompañado de César Yañez, su vocero ante los medios de comunicación. Unos pasos atrás va  su hijo José Ramón .

En un avión comercial viajará al norte del país, en su segunda campaña por la presidencia del país.

Durante casi tres semanas, el candidato ha presumido que, a diferencia de sus contrincantes, viaja en la clase turista de vuelos comerciales y lo mismo hará, promete, “cuando sea presidente”.

“Es ofensivo en una situación de crisis el que haya ostentación, derroche de la llamada clase política. Es un acto de irresponsabilidad el que se haga campaña en aviones privados, de lujo (…) y que se llegue a los aeropuertos a los estados y que de ahí se utilicen helicópteros para ir a comunidades indígenas”, dijo en su conferencia matutina este martes en alusión a los gastos en transporte hechos por los candidatos del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN).

La panista Josefina Vázquez Mota recorre trayectos cortos en un camión de pasajeros y los viajes largos los realiza en vuelos privados, en los que solo va acompañada por sus colaboradores.

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Enrique Peña Nieto viaja siempre en vuelos privados, en helicóptero los trayectos cortos y en avión los largos. Al igual que Vázquez Mota, el priísta vuela acompañado únicamente por sus colaboradores cercanos, y en ocasiones contrata chárter para la prensa que lo acompaña con todos los gastos pagados.

Este martes, el diario Reforma publicó que los candidatos del PAN y del PRI gastan entre 1,550 y 12,000 dólares por hora en arrendar aeronaves para sus viajes de campaña.

“Esto demuestra mucha insensibilidad mucha irresponsabilidad, viven en otro mundo estos candidatos. Es ofensivo ante la pobreza que hay en el país y las necesidades que tiene la gente”, dijo López Obrador este martes.

Cuando el candidato de izquierda aborda su vuelo comercial, algunos pasajeros y miembros de la tripulación se animan a sonreirle y él responde y saluda mientras ocupa su asiento. Regularmente se sienta en los lugares del centro. El avión despega y espera a que le ofrezcan algo de tomar. Pide un café y después revisa algunos textos o noticias en un iPad que le acerca Yañez.

Le gusta aprovechar el tiempo de vuelo para revisar los discursos que pronunciará en los mitines . “No estoy acostumbrado a que me hagan mis textos, no puedo leer un texto que no haya hecho”, dice a CNNMéxico.

"Leo lo que puedo, a veces me distraigo leyendo novela, acabo de leer una novela de Taibo (Paco Ignacio): Tiempo de Zopilotes”, apenas termina de decir el nombre de la obra cuando suelta una carcajada. El candidato se levanta y camina a la parte posterior de la aeronave, saluda de beso a las sobrecargos y charla con ellas durante varios minutos. El encuentro termina con la fotografía del recuerdo.

Cuando el vuelo termina, López Obrador apura el paso a la salida y al cruzar la última puerta, decenas de simpatizantes corean porras, gritan, agitan pancartas, banderas y si lo tienen al alcance, lo abrazan y algunas mujeres lo besan. No escatima tiempo, escucha sus peticiones, felicitaciones, y se deja consentir y tomar fotos, antes de abordar la camioneta que lo llevará al mitin.

Luego de cumplir con la agenda de trabajo regresa al aeropuerto para
tomar el vuelo que lo llevará de vuelta al Distrito Federal, donde
vive.

Al anochecer, la terminal aérea tiene una mayor cantidad de pasajeros
que esperan abordar un vuelo. López Obrador se sienta en una de las sillas de la sala de espera y poco a poco, algunos pasajeros se acercan, lo felicitan y le piden que pose para sus teléfonos celulares.

“No soy militante de ningún partido político, pero soy un notario público. López Obrador es una figura política muy importante y tiene buena ideología, por lo que hace para tratar de cambiar el rumbo del país”, dice a CNNMéxico Héctor Iván González, un joven de 32 años originario de Torreón que se detuvo a charlar con el candidato presidencial.

“La gente es muy respetuosa, cariñosa y sabe que estamos luchando en bien de todos, por eso nos respetan, aunque no estén con nosotros nos respetan”, dice el político tabasqueño sobre las reacciones de las personas a su paso por lo aeropuertos.

Minutos después aborda. Como en casi todos sus viajes es el último en subir, ocupa su asiento, pide agua y espera el momento para encender el iPad de su colaborador y revisar sus spots para televisión más recientes.

Tras un rato de vuelo, el capitán anuncia el descenso de la aeronave, preludio del próximo aterrizaje. El avión se detiene, el candidato desabrocha su cinturón, apresura el paso y llega hasta la salida del aeropuerto donde una camioneta lo espera para llevarlo a casa.

Nota del editor: Tú preguntas, los presidenciables responden. Sé parte de los  Foros CNN , un espacio de participación activa.

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