Atlacomulco y la esperanza de progreso con Enrique Peña Nieto
La victoria de Enrique Peña Nieto en los comicios de julio pasado es, para algunos habitantes de Atlacomulco, uno de los milagros del Señor del Huerto, el "santo patrono" del municipio.
Como muestra de agradecimiento, ciudadanos como Nancy Pérez, de 39 años, han llevado veladoras y ofrendas al santuario ubicado en el centro del poblado mientras esperan el 1 de diciembre, cuando Peña Nieto tome posesión de su nuevo cargo.
Así, luego de casi un siglo de forjar políticos emblemáticos para la historia moderna del país, México tendrá un presidente nacido en Atlacomulco .
Nancy celebra la victoria del priista con el Señor del Huerto porque según la leyenda local, es el "santo patrono" al que se encomiendan los políticos nacidos aquí. El santuario se construyó en el siglo XIX, después de que el cuerpo de una anciana, que falleció frente a su imagen, se conservara en perfecto estado por una larga temporada, según la diócesis de Atlacomulco.
"Entre paisanos, entre nosotros tenemos que apoyarnos, no podemos darnos la espalda", dice.
Como ella, los habitantes de este sitio ubicado al noroeste del Estado de México, la entidad más poblada del país, esperan que con el triunfo del priista venga el progreso para los casi 94,000 atlacomulquenses.
No es que le vaya mal a Atlacomulco, su PIB per cápita es 4.6 veces más alto que el del municipio más pobre de México, pero sus habitantes están seguros de que con Peña Nieto "les llegará algo mejor" y habrá más progreso para su poblado.
Según los atlacomulquenses, todo está listo para iniciar una nueva etapa de mejoras gracias al "milagro" del Señor del Huerto, por lo que se declaran listos para ver lo que el "santo patrono" traiga de mano de Enrique Peña Nieto.
La tradición política
Según cifras oficiales, la principal actividad económica de Atlacomulco es el comercio, aunque la más conocida es otra que no figura en las estadísticas oficiales: la política.
Este poblado es cuna de un grupo político emblemático en el país conocido como Grupo Atlacomulco, y que data de 1942, cuando el diplomático Isidro Fabela se convirtió en el primer gobernador del Estado de México nacido en este lugar. Desde entonces, varios políticos destacados —entre ellos cinco gobernadores, incluido Peña Nieto—, han surgido de ese grupo, aunque todos han negado su existencia.
Los cuatro exgobernadores mexiquenses nacidos en Atlacomulco son familiares directos de Enrique Peña Nieto, que vivió hasta los 11 años en las calles del centro de este pueblo, cuando sus padres decidieron mudarse a Toluca.
Federica Martínez Contreras tiene 76 años, siempre ha vivido aquí y presume que es "comadre" de María del Perpetuo Socorro Ofelia Nieto Sánchez, mamá de Enrique Peña. Para ella, hay dos motivos por los que finalmente hay un presidente de la República nacido en la región: el "santo patrono" y el "linaje político".
Con el "milagro del Señor del Huerto cumplido", esta anciana que vive de atender una miscelánea, pide que Peña cambie la percepción de que en Atlacomulco "todo es ambición por la política" . Dice que espera que el nuevo presidente muestre que un atlacomulquense puede trabajar por "el bien del país y no solo por sus amigos".
Trinidad López Gutiérrez, de 51 años, piensa que el crecimiento económico del poblado —donde en la última década se han inugurado cines, plazas comerciales y se han ampliado las carreteras— se debe al éxito de sus políticos.
Dice que la zona industrial —en la que destaca una embotelladora, una maderera y una siderúrgica— llegaron gracias a "los gobernadores nacidos aquí" y que por eso está contento con el éxito de Peña Nieto, quien "procurará que su pueblo esté bien".
El crecimiento de Atlacomulco
Según las autoridades estatales, Atlacomulco es una de las regiones más seguras del Estado de México. Durante 2011, hubo 983 denuncias por delitos del fuero común. Esta cifra representa sólo el 0.44% del total de crímenes de este tipo denunciados en la entidad, pero supera el promedio nacional, de 688 por municipio.
Los vecinos entrevistados vinculan el aumento de la inseguridad a la llegada de "gente nueva" que se ha establecido en las unidades habitacionales construidas desde el mandato de Arturo Montiel (1999-2005) en las inmediaciones de la ciudad, lo que ha llevado a que la población en la última década haya aumentado 51%, según cifras oficiales.
José Rivas, cuya familia ha tenido desde hace cuatro décadas una ferretería en el centro, dice que hace quince años todavía era común que en Atlacomulco todos se conocieran y no hubiera "extraños", pero que "la buena vida" que hay en el municipio ha llevado a que cada vez sean más los que deciden vivir ahí y cree que con Peña Nieto como presidente, serán todavía más los que emigren a su poblado.
"Va a continuar lo que empezó como gobernador"
Durante el gobierno de Peña Nieto en el Estado de México (2005-2011), en Atlacomulco se invirtieron 315 millones de pesos para la construcción de un libramiento vehicular, un distribuidor vial, alumbrado público, drenaje pluvial e instalaciones telefónicas, pero no se redujo el índice de desempleo, que se elevó a 5%, cuando en el 2000 era de 1.7%.
Tras vivir 30 años en el sureste del país, José Dolores Benegas, de 64 años, regresó a Atlacomulco para "ver triunfar" a Peña Nieto en el lugar donde ambos crecieron. Dice que le gustaría ver cómo el priista "hace cosas" por su ciudad, pero que la falta de empleo fijo —de momento trabaja como lustrador de zapatos—, lo obligará a emigrar de nuevo en diciembre próximo.
Es uno de los atlacomulquenses confiados en que con Peña Nieto como presidente, no sólo el poblado mejorará sino el Estado de México en general, "va a continuar lo que empezó como gobernador", dice José Dolores, al recordar la administración del priista que culminó en septiembre de 2011.
Espera poder volver en unos años, cuando el priista ya haya "agarrado vuelo" en la Presidencia y entonces pueda encontrar trabajo en este municipio del Estado de México.
Las demandas que los atlacomulquenses tienen para el priista podrían tener sustento en las mejoras que tradicionalmente han hecho otros presidentes en sus lugares de origen.
Miguel de la Madrid (1982-1988), por ejemplo, echó andar en su entidad el "Plan Colima", que entre otras cosas, logró que Manzanillo se convirtiera en el puerto comercial más importante del país.
El mandatario Vicente Fox (2000-2006) inauguró en León, Guanajuato, la primera Biblioteca Central de la ciudad y un centro cultural, además de una aduana Interior e Intermodal de Ferrocarriles, para hacer de esa entidad "un sitio estratégico del comercio en México".
En su primera visita al Estado de México como presidente electo, realizada el 25 de octubre, Enrique Peña Nieto dijo que trabajaría por el país, pero también hizo énfasis en el compromiso "de entrega total" para servir a lo que llamó la tierra que lo vio nacer, "tierra mexiquense" de la que se dijo "orgulloso de ser".