Peña Nieto 'debe' detalles de la estrategia contra el crimen
Los primeros nueve meses de gobierno de Enrique Peña Nieto arrojan números negros en el combate a la delincuencia y aún no se conocen detalles de la estrategia para conseguir un “México en paz” como lo prometió el mandatario, coincidieron analistas consultados por CNNMéxico.
La inseguridad es el principal problema del país desde mayo de 2011 a mismo mes de este año —para 32% de los mexicanos—, de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Percepción de Inseguridad Ciudadana en México, realizada por la asociación México Unido contra la Delincuencia. Le sigue la crisis económica, con un 26%.
El consultor y analista en temas de seguridad, Eduardo Guerrero, quien realiza un registro de los homicidios en México, refiere que en lo que va del presente sexenio, se observa un descenso sostenido “gradual”, en el número de muertos por el crimen organizado.
Destaca, sin embargo, que en julio hubo en repunte del 37% en el número de homicidios dolosos respecto al mes anterior. “En junio contabilizamos alrededor de 900 muertos y en julio la cifra alcanzó los 1,214”, detalló según sus registros.
Según cifras oficiales, de diciembre de 2012 a junio de este año se han registrado 11,129 homicidios dolosos en el país, de los cuales 7,128 —el 64%— están vinculados al crimen organizado o delitos federales, reporta el Sistema Nacional de Seguridad Pública y la Secretaría de Gobernación.
En el mismo periodo del año pasado se registraron 12,793 homicidios dolosos, por lo que se registró un descenso de 13%.
La forma de contabilizar los homicidios cambió a partir de julio, cuando el gobierno federal anunció que no habrá una clasificación de aquellos relacionados con el narcotráfico.
Los analistas consideran que Peña Nieto sí podrá “presumir” en su Primer Informe de Gobierno, el 1 de septiembre, los avances en el rediseño institucional de las dependencias, como la fusión de la secretaría de Seguridad con la de Gobernación, pero faltan resultados y estrategias concretas.
Para Javier Oliva, experto en asuntos de fuerzas armadas y académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), “hay una profunda transformación institucional y jurídica en el sector de la seguridad pública”.
La desaparición de una Secretaría de Seguridad Pública Federal, “relevante por el cuantioso presupuesto que manejaba” (40,000 millones de pesos en 2012); la reestructuración de la ley orgánica de la administración pública federal; la modificación al reglamento interno de la Secretaría de Gobernación y la creación de la Comisión Nacional de Seguridad “han sido un esfuerzo político, administrativo y legal muy importante”, asegura Oliva.
Sin embargo, la creación de la Gendarmería Nacional, una de las principales propuestas del gobierno de Peña Nieto , programada para el próximo mes de septiembre, se pospuso para julio de 2014 con la mitad de los 10,000 elementos anunciados.
En la opinión de Eduardo Guerrero, estas medidas “han concentrado la atención de las autoridades federales”, restando tiempo para dedicarse a lo “sustantivo”, que es el combate a la inseguridad.
“La parte institucional los ha distraído mucho, la fusión de la secretaría de Seguridad Pública con la de Gobernación ha sido un trabajo de rediseño institucional muy arduo, muy complejo en términos legales y administrativos y les ha quitado tiempo para concentrarse en lo sustantivo: la nueva estrategia de seguridad, que a mí me parece sigue siendo más una promesa que una realidad”, agrega Guerrero.
La activista y presidenta de la organización civil Causa Común, María Elena Morera, indica que en estos primeros nueve meses de gobierno se trazaron los lineamientos generales de la estrategia en contra de la inseguridad, “pero faltan detalles”.
“El presidente debe dar definiciones de hacia dónde va el gobierno en seguridad pública y justicia, esperamos que en este primero informe el presidente defina cuál es la estrategia, cuáles van a ser los ejes de acción y que nos digan que van a tener indicadores”, dijo Morera a CNNMéxico.
“El problema que tenemos es que siempre nos quedamos en carta de buenas intenciones, quisiéramos que en esta ocasión la estrategia también viniera con los programas e indicadores de seguimiento y tiempos”, agregó la activista.
El riesgo de los grupos armados y movimientos sociales
El analista Eduardo Guerrero advierte del riesgo que hay en la mutación de grupos sociales inconformes hacia la delincuencia, como “grupos radicales del magisterio, normalistas, los sindicatos, que se oponen a la agenda de reformas del presidente Peña”.
En los primeros días de este año surgieron en México grupos civiles armados llamados “de autodefensa”. Habitantes de comunidades rurales principalmente en Michoacán y Guerrero, han tomado las armas para proteger sus comunidades ante una falta de acción de las autoridades , argumentan, contra el crimen organizado. Pero el gobierno federal los ha vinculado en algunos casos a la delincuencia organizada.
“Es un caldo muy complicado porque puede empezar a haber vinculaciones entre policías comunitarias y cárteles como ya se han registrado en algunas zonas de Michoacán , esto podría después vincularse con el movimiento del magisterio o los normalistas”, advierte Guerrero.
Los números rojos por homicidios se mantienen
El presidente Enrique Peña Nieto informó este martes ante el Consejo Nacional de Seguridad Pública que han capturado a 62 de 122 de los presuntos delincuentes más buscados, gracias a los datos de inteligencia.
De diciembre de 2012 a julio de 2013 se redujo un 20% el número de homicidios por delitos federales respecto al mismo periodo del año pasado.
Esta reducción, dijo, se logró aplicando la ley y priorizando los grupos criminales más violentos del país, aunque estos son “apenas primeros resultados” del gobierno, por lo que dijo “no caerá en triunfalismos ni en autoelogios”.
En el gobierno de Felipe Calderón se registraron 104,088 homicidios dolosos, y de diciembre pasado a junio, ya en la administración de Enrique Peña Nieto (2012-2018), se han contado 11,129 muertes de este tipo, según cifras oficiales.
La actual administración, anunció en la segunda semana de agosto que, a partir de esa fecha, contabilizaría en un solo rubro todos los homicidios dolosos que se cometen en el país , en lugar de contar aparte los casos presuntamente vinculados con el crimen organizado.
Aún siendo candidato, Peña Nieto se comprometió a reajustar la estrategia de seguridad, conservando a la Policía Federal, Ejército y Marina en las calles hasta que hubiera condiciones para que volvieran a los cuarteles.
El 17 diciembre pasado, presentó una política de seguridad regionalizada en la que el país se divide en cinco zonas para implementar la estrategia contra la violencia según las necesidades de cada estado y de la actuación de los grupos criminales.
En enero de 2012, la Procuraduría General de la República (PGR) dio a conocer que desde diciembre de 2006 y hasta septiembre de 2011, habían muerto 47,515 personas en hechos relacionados por supuesta rivalidad delincuencial.
La prevención
Los analistas coincidieron en que el tema de la prevención ha estado presente al menos en el discurso, durante los primeros nueve meses de la gestión de Peña Nieto.
“Querer una subsecretaría de Prevención y Participación Ciudadana es algo muy importante porque hay un énfasis al tema de la prevención, tiene un enfoque sociológico, psicológico, urbanístico, que no se tuvo con Calderón (Felipe)”, afirma Oliva.
“Suena interesante aunque tiene pocos recursos, a la par de la parte preventiva necesitamos acciones disuasivas del delito, de la violencia, bien planeadas, concentrándose en los grupos más agresivos y eso creo que tampoco se ha registrado”, dijo Eduardo Guerrero.
La percepción de la inseguridad ha venido acompañada por una nueva política de comunicación social, en la que los capos capturados no son presentados de “forma aspiracional, dijo recientemente el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, ahora son presentados de forma “sumisa”.