El gobierno federal apuesta por una vía negociada con las autodefensas
El gobierno federal y parte de los grupos de autodefensa llegaron este lunes a un acuerdo para que las milicias se conviertan en fuerzas de defensa rural con reconocimiento y apoyo oficial, un viraje en la posición del gobierno federal que llamó a su desarme.
Las autodefensas se institucionalizarán al incorporarse a los Cuerpos de Defensa Rurales, y aunque se mantendrán armados, deberán de registrar ante la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) todo su arsenal.
A cambio, las autoridades se comprometieron a capacitarlos y darles el equipo necesario para su trabajo, según el acuerdo firmado este lunes.
El comisionado de seguridad en Michoacán, Alfredo Castillo, aseguró que a partir de este martes se definirá la tarea para registrar las armas de los grupos de autodefensa ante la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
"Se reclutarán los perfiles idóneos y que estén plenamente identificados por las comunidades para que puedan ser dados de alta en estos municipios y puedan defender a sus compañeros", dijo el comisionado en entrevista al noticiero nocturno de Grupo Milenio.
Los líderes de las comunidades de Churumuco de Morelos, Nueva Italia de Ruíz, La Huacana, Parácuaro, Tancítaro, Coalcomán de Vázquez Pallares, Aquila y Coahuayana de Hidalgo, quienes firmaron el acuerdo, se comprometieron a entregar una lista de sus integrantes, a quienes se les abrirá un expediente a cargo de la Sedena.
El acuerdo anunciado por el gobierno solo incluye a las milicias de ocho comunidades, sin la participación en este convenio de los pueblos que iniciaron el movimiento de autodefensas en febrero de 2013: Tepalcatepec, La Ruana, Buenavista, Aguililla y Coalcomán.
Las autodefensas se hicieron del control de una veintena de municipios, principalmente en Tierra Caliente, con la intención de expulsar a Los Caballeros Templarios, el cártel del narcotráfico al que acusan de extorsionar, robar y asesinar a pobladores.
Luego de que las autodefensas se enfrentaran a tiros contra presuntos templarios a principios de este mes en tres municipios de Michoacán, el gobierno federal desplegó en la entidad a cerca de 10,000 efectivos del Ejército y la policía federal.
A la par, el gobierno federal intentó desarmar a las autodefensas e impedir que siguieran tomando comunidades, lo que derivó en un altercado a tiros en la comunidad de Antúnez con elementos del Ejército, quienes abrieron fuego contra los pobladores, según las autodefensas.
Tras los hechos, el gobierno federal suspendió el desarme y permitió que las autodefensas continuaran con sus patrullajes y con la instalación de retenes. Los grupos armados comenzaron entonces a trabajar en coordinación con las fuerzas federales, con las cuales comparten información .
El presidente Peña Nieto entonces propuso la semana pasada durante una gira por Davos, Suiza, que las autodefensas se sujetaran a la ley, dejaran las tareas de seguridad al Estado y se unieran a las policías municipales, algo que las autodefensas consideraron "un riesgo" para quienes integran el movimiento armado , por la desconfianza que existe en contra de las fuerzas de seguridad locales.
Según la Ley Orgánica del Ejército y la Fuerza Aérea , los Cuerpos de Defensa Rurales forman parte de la estructura militar y se integran "con personal voluntario de ejidatarios mexicanos por nacimiento que no adquieran otra nacionalidad, mandados por militares profesionales", y tienen como misión "cooperar con las tropas en las actividades que estas lleven a cabo, cuando sean requeridos para ello por el mando militar".
El anuncio de la firma del acuerdo fue hecho unas horas después de que fuerzas federales detuvieron a Dionicio Loya Plancarte , alias El Tío Nicho, uno de los principales líderes de Los Caballeros Templarios.
Loya Plancarte fue capturado por militares la madrugada de este lunes en Morelia, capital de Michoacán, en una casa donde se encontraba escondido en un clóset, informó en conferencia de prensa Monte Alejandro Rubido, secretario Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).
Desde que se lanzó el operativo federal, el pasado 14 de enero, han sido puestos a disposición del Ministerio Público federal y del fuero común a 110 personas por la comisión de diversos ilícitos.
La tercera parte de las detenciones mencionadas se han realizado en Apatzingán, uno de los 27 municipios con presencia federal y considerado bastión de Los Caballeros Templarios.
Las fuerzas federales han desmantelado en estos 13 días tres laboratorios clandestinos y ubicaron y destruyeron al menos 49 plantíos de marihuana.
