Boeing y Airbus, juntos por mejor aire
Boeing y Airbus, los dos mayores fabricantes de aviones comerciales en el mundo, firmaron un acuerdo que permita mejorar el tráfico aéreo y reducir las emisiones de contaminantes.
El convenio de colaboración busca asegurar la interoperabilidad global en la Gestión del Tráfico Aéreo como parte de una iniciativa para ayudar a reducir el impacto medioambiental de la aviación.
“Las compañías se esforzarán para acelerar las mejoras en el sistema de gestión del transporte aéreo mundial con el fin de aumentar la eficiencia y eliminar la congestión del tráfico”, dijo Boeing en un comunicado de prensa.
La Gestión de Tráfico Aéreo pretende mejorar el sistema de transporte aéreo global al proporcionan rutas más eficientes, mejor gestión de llegadas y control de velocidad disminuirán demoras ineficientes y tiempo en el aire, ahorrando combustible y reduciendo las emisiones.
Un vuelo transcontinental genera una contaminación equivalente a la producida por una vivienda durante un año, es decir unos 160 kilos de CO2 (Dióxido de carbono) según estimaciones de la Asociación Internacional para el Transporte Aéreo (IATA por sus siglas en inglés).
La iniciativa de colaboración de Airbus y Boeing forma parte de una estrategia de tres frentes para mejorar el rendimiento medioambiental de la aviación. Los otros dos aspectos son la competencia que ha desarrollado productos que, aseguran las compañías, son más eficientes como el Airbus A380 y el Boeing 787, y el apoyo para una unión industrial en cuestiones medioambientales donde proceda.
“En los últimos 40 años, la industria de la aviación ha logrado mejoras importantes en la eficiencia de los aviones, con reducciones del 70% en CO2, del 90% en ruido y con un 90% menos en cuanto a hidrocarburos sin consumir”, dijo Boeing.
El Consejo Asesor para la Investigación Aeronáutica en Europa (ACARE por sus siglas en inglés) ha fijado como objetivo reducir el CO2 en un 50% y el NOx (Óxidos de nitrógeno) en un 80% para el año 2020, por lo que las compañías armadoras de aviones consideran que un sistema de gestión de tráfico aéreo modernizado será clave para alcanzar esta meta.
