La tecnológica SAP baja sus previsiones
SAP, el mayor fabricante de software de administración de empresas del mundo, redujo su pronóstico de ingresos del 2008 y no entregó nuevas previsiones para el 2009, debido a que la crisis económica mundial ha afectado la demanda por sus productos.
Los títulos de SAP bajaban un 5.2%, a 23.27 euros, tras caer hasta un 15%.
"La menor visibilidad seguirá sobresaliendo por ahora", aseguro Sarah Friar, analista de Goldman Sachs.
"Aún consideramos muy agresivas las estimaciones para el 2009, pero el lado de compras ya se encuentra en un escenario de tipo recesivo", continuó Friar.
Analistas dijeron que la decisión, que SAP dio a conocer el lunes en la noche, significa que es poco probable que la compañía alcance sus metas de ventas para el año. Advirtieron que otros fabricantes de software tampoco las lograrán.
Laura DiDio, analista de Information Technology Intelligence Corp, indicó que hay "una gran posibilidad" de que las ventas de SAP no cumplan sus objetivos este año.
"Cada vez que alguien retira sus estimaciones, no es buena noticia. Seguramente SAP está sufriendo el escozor del duro clima económico mundial", añadió.
SAP retiró sus pronósticos anuales de ventas de software que no se rigen por los principios de contabilidad generalmente aceptados (GAAP, por su sigla en inglés) y de ingresos de servicios relacionados con sus software, dos cifras que los inversionistas monitorean de cerca para obtener una idea de hacia dónde se dirige el negocio.
"Debemos ser realistas en términos de la situación económica externa. Vemos una recesión ahora mismo", dijo el portavoz de SAP Saswato Das.
SAP manifestó el 6 de octubre que el negocio cayó inesperadamente en las últimas dos semanas del tercer trimestre, que finalizó el 30 de septiembre.
En ese momento, dijo que revisaría sus previsiones para el resto del año y actualizaría a los inversionistas al entregar sus resultados del tercer trimestre, el 28 de octubre.
No obstante, la compañía terminó por retirar sus estimaciones anuales al entregar sus resultados trimestrales tarde el lunes, un día antes de lo programado.
