Goldman Sachs ‘salva’ a sus ejecutivos
El banco estadounidense Goldman Sachs Group Inc. pagó el año pasado un total de 58 millones de dólares (mdd) a su co-presidente Jon Winkelried y al consejero general Gregory Palm para comprarles su parte en el negocio, ya que sufrían una severa crisis de efectivo.
Documentos entregados a la Comisión de Valores de Estados Unidos el viernes mostraron también que el presidente ejecutivo Lloyd Blankfein y otros ejecutivos, aunque renunciaron a sus bonos del 2008, recibieron sustanciales retornos de fondos de inversión exclusivos.
Goldman reveló que compró los intereses del fondo de empleado de Palm en 38.3 millones de dólares y de Winkelried, por 19.7 millones de dólares, para ayudarlos a "responder a sus necesidades de liquidez", dijo un portavoz de Goldman.
Sin estas operaciones, dos de los mayores accionistas del banco podrían haber tenido que salir a buscar fondos a través de ventas de acciones.
"Ni nosotros ni los ejecutivos envueltos pensamos que era de interés de su firma (de los ejecutivos) vender acciones en un mercado extraordinariamente turbulento", dijo un portavoz. "Pensamos que enviaríamos señales equivocadas", agregó.
Winkelried, de 49 años, es el segundo mayor accionista individual de Goldman con 2.8 millones de acciones, según el documento. Palm es el tercero.
Winkelried sacó casi un 30% de su fondo de empleado, mientras que Palm vendió un 25%. Goldman escogió las participaciones que quería y negoció el precio.
La decisión de comprarle a los ejecutivos se adoptó a principios de septiembre, antes de que Goldman aceptara 10,000 millones de dólares en fondos del Gobierno, explicó un portavoz.
