Juez exonera a 2 ex empleados Stanford
Tras considerar débiles las evidencias acusatorias, un juez federal exoneró este viernes a dos ex empleados del financiero R. Allen Stanford acusados de destruir miles de documentos de la compañía del otrora magnate para obstruir la investigación federal sobre un presunto fraude de 7,000 millones de dólares mediante un esquema de "pirámide".
Luego de un juicio de casi dos semanas y de dos días de deliberaciones del jurado, el juez federal de distrito Richard W. Goldberg declaró inocentes a Thomas Raffanello y a Bruce Perraud. Raffanello fue jefe de seguridad del Stanford Financial Group y también agente de la dirección antidrogas de Estados Unidos o DEA, mientras que Perraud era directivo tecnológico.
Sobre el punto clave de si ambos intentaron cometer un delito, Goldberg dijo: "La evidencia muestra falta de sustancia".
Raffanello y Perraud pudieron ser sentenciados hasta 50 años de prisión cada uno de ser convictos de asociación delictuosa, obstrucción a la investigación de la Comisión de Valores y Bolsa de Estados Unidos y dos acusaciones relacionadas de los documentos destruidos el 25 de febrero del 2009, justo cuando el poderío bancario global de Stanford se venía abajo y los agentes federales confiscaban sus activos.
Hace una semana, un juez federal de Texas ordenó que todos los expedientes de Stanford fueran conservados por el síndico del caso, mientras que los testimonios mostraron que Perraud suspendió el plan de destrucción. Pero Raffanelo ordenó continuar debido a que todos los documentos estaban duplicados en computadoras de la empresa, las cuales, según los abogados de la defensa, estaban a disposición de la comisión de bolsa y otros investigadores.
"Nadie intentó ocultar nada a nadie", afirmó el representante legal de Perraud, Ed Shohat, en su exposición final en el proceso.
Goldberg dijo que la absolución no puede ser apelada.
Raffanello, portando un broche de la DEA, abrazó a parientes y simpatizantes afuera de la corte.
"Creo en Estados Unidos, creí que este sistema tendría el resultado correcto, y lo hizo", dijo Raffanello, quien trabajó en los juicios del ex líder panameño Manuel Noriega y del capo colombiano Fabio Ochoa.
Perraud dijo que era momento de buscar un nuevo trabajo. "Esto nos quita un enorme peso. No se puede imaginar lo que fue el año pasado", añadió.
Otrora uno de los hombres más ricos del mundo, Stanford está preso en Houston mientras comienza su juicio por el fraude atribuido al Stanford Financial Group , ahora desaparecido, que operó sucursales en varias naciones como Colombia, Ecuador, México, Perú y Venezuela. Stanford niega que se haya cometido un fraude en su banco, cuyas oficinas principales estaban en Antigua y Barbuda.
Las exoneraciones en Miami no tienen una relación directa con el caso central contra Stanford.
