British Airways se va a huelga
Los empleados de cabina de British Airways irán a una huelga de tres días, luego de que fracasaron las negociaciones entre el sindicato y la gerencia, lo que constituye un dolor de cabeza para el Gobierno a semanas de una elección general. La huelga comenzará el sábado y afectará los planes de viajes de miles de personas. Los inconvenientes afectan al primer ministro Gordon Brown, debido a que el sindicato Unite, que organiza la protesta, es el mayor financista individual de su partido, el Laborista.
Brown, que desde hace tiempo calificó a la huelga como "injustificada y deplorable", demandó que sea depuesta de manera inmediata.
De manera simultánea, los trabajadores de señalización del sistema ferroviario complicaron la situación del Gobierno al aprobar una medida en rechazo a despidos y cambios en las prácticas laborales, lo que elevó la posibilidad de que ocurra la primera huelga ferroviaria nacional en 16 años.
El gremio no fijó una fecha.
Las elecciones se realizarán el 6 de mayo.
El líder de la oposición conservadora, David Cameron, acusó a Brown de fracasar en el intento de frenar a Unite y comparó la situación con la década de 1970, cuando se vivieron varios periodos de tensión causados por el sindicato.
Pelea de halcones
Tony Woodley, secretario general de Unite, dijo a periodistas que los tripulantes de cabina comenzarán la huelga de tres días a media noche y luego la retomarán el 27 de marzo hasta el 30 de marzo, justo antes del inicio de la semana santa.
Woodley dijo que "halcones" dentro de BA buscan agudizar la disputa para ganar tiempo, incluyendo al presidente ejecutivo, Willie Walsh.
"Creo que es un caso típico del señor Walsh, quien desafortunadamente es uno de los halcones que busca la guerra con nuestros miembros debido a que se opone a un acuerdo negociado", dijo.
La aerolínea pretende ahorrar 62.5 millones de libras (95 millones de dólares) para afrontar la caída de la demanda, la volatilidad de los precios de los combustibles y el aumento de la competencia de las compañías de bajo costo.
En anuncios a toda página publicados en la prensa británica del viernes, Walsh dice que un "número significativo" de los tripulantes de cabina trabajarán durante la huelga y que la mayoría de la plantilla no apoya la medida.
