Sony Ericsson es acusado de ‘pirata’
Las empresas Telcel, Iusacell, Telefónica y Unefón deben dejar de comercializar celulares de la marca Sony Ericsson debido a que estos equipos contienen de forma ilegal la plataforma de descarga de contenidos Playnow. En entrevista con Notimex, el abogado Sergio de Alba explicó que Sony Ericsson nunca ha tenido licencia o autorización alguna para usar los registros de la marca Playnow en el país, ya que estos se encuentran a nombre del empresario mexicano José Manuel Somohano.
"El señor Somohano es dueño de dos registros de marca, el más antiguo data del año 2000 que protege el uso y descarga de juegos de video en Internet y el segundo toda la gama de telecomunicaciones como descarga de ringtons y de música en celulares".
Sin embargo, desde el año 2004 Sony Ericsson ha utilizado en México la marca Playnow para identificar el portal de descarga de juegos, videos y multimedia por Internet, así como la aplicación que se encuentra precargada en sus celulares.
De Alba explicó que los servicios periciales de la Procuraduría General de la República (PGR), instancia ante la cual se abrieron dos averiguaciones previas en mayo pasado, determinaron que se trata de un caso de piratería de marca.
Es de tipo penal, añadió, y no sólo comete el delito quien fabrica la piratería sino quien la almacena, distribuye y la vende, lo cual significa que Telcel, Telefónica, Iusacell y Unefón podrían considerarse como presuntos responsables.
El abogado refirió que desde el año 2005 Sony Ericsson ha intentado registrar la marca en cinco ocasiones, pero en todas ellas el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) emitió resoluciones de negativa debido a la preexistencia de los derechos registrales de Somohano.
En un nuevo intento por tener la propiedad de la marca, el fabricante de celulares demandó en 2010 ante el IMPI la caducidad del registro, litigio que fue resuelto a favor del actual titular y que quedó firme por no haber sido impugnado por los abogados de la multinacional.
"La semana pasada enviamos cartas a los directivos de los operadores de telefonía móvil en las que solicitamos que de manera inmediata sus filiales y distribuidores se abstengan de seguir almacenando, transportando, distribuyendo y vendiendo estos teléfonos que ostentan una falsificación de marca", concluyó De Alba.
