El premier belga aplaude nacionalización
El Gobierno belga ha evitado una "crisis sistémica" al nacionalizar la filial en el país del grupo financiero Dexia, afirmó este martes el primer ministro belga en funciones, Yves Leterme. "Gracias a esta acción eficaz y adecuada del Estado, la crisis sistémica ha podido ser evitada", afirmó Leterme en una intervención ante la comisión de Finanzas del Parlamento belga.
La mayoría de los diputados se ha manifestado favorable a la acción del Gobierno, pero ha cuestionado por qué los directivos de Dexia han ignorado algunas de las recomendaciones realizadas por una comisión parlamentaria especial en 2008, cuando la entidad fue recapitalizada por los gobiernos de Bélgica, Francia y Luxemburgo.
La nacionalización de Dexia Banca Bélgica forma parte de un amplio plan acordado por los gobiernos belga, francés y luxemburgués para ayudar al grupo, que enfrenta serios problemas de liquidez debido a su exposición a la crisis de la deuda soberana en Grecia.
La operación, valorada en 4,000 millones de euros, recibió este lunes el visto bueno de la Comisión Europea (CE), que exigió al Estado belga presentar un nuevo plan de reestructuración para la entidad, asegurando su viabilidad a largo plazo.
La estrategia incluye, además, la creación de un "banco malo" para aislar a los activos tóxicos que están en el origen de los problemas de Dexia.
Esa entidad residual recibirá garantías de 54,000 millones de euros de parte de Bélgica, de 32,850 millones de euros de Francia, y de 3,150 millones de euros de Luxemburgo.