La expropiación de YPF, a decisión final
null
La Cámara de Diputados de Argentina comenzó este jueves el análisis del proyecto de expropiación de la petrolera española Repsol-YPF , que fue avalado la madrugada de este jueves por el Senado.
Las comisiones de Energía, Presupuesto y Hacienda, y Asuntos Constitucionales recibieron el dictamen que fue avalado, luego de 15 horas de discusión en la Cámara alta, con 63 votos a favor, tres en contra y cuatro abstenciones.
El diputado del oficialista Frente por la Victoria, Agustín Rossi, confirmó que el proyecto será abordado la semana próxima en sesiones especiales del pleno citadas para los días 2 y 3 de mayo.
Consideró que se necesitarán esos dos días de debate porque la mayoría de los 257 diputados que componen la cámara baja querrán exponer los argumentos de su voto en una jornada que será histórica.
Rossi celebró el apoyo "contundente" que la iniciativa enviada por la presidenta Cristina Fernández obtuvo en el Senado y confió en que los diputados le darán también un abrumador aval mayoritario.
Por ahora, dijo, se calcula que el proyecto será apoyado, por lo menos, con 200 votos, lo que es más que suficiente para garantizar su aprobación.
El presidente de la cámara, Julián Domínguez, consideró, por su parte, que la recuperación de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), una empresa que se mantuvo privatizada durante dos décadas, "va a marcar una época" en Argentina.
La nueva ley declara de interés público y nacional, y como objetivo prioritario de Argentina, el autoabastecimiento energético, así como la explotación, industrialización, transporte y comercialización de hidrocarburos.
A lo largo de 19 capítulos, prevé también la recuperación del control de YPF, declarando de interés público y sujeto a expropiación el patrimonio de la empresa.
Una vez que el proyecto culmine su trámite legislativo, el 26.03% de las acciones de YPF serán del Estado; el 25.46% del argentino Grupo Petersen; el 24.99%, de las provincias; el 6.43%, de Repsol y el 17.09% cotizará en el mercado de valores.
Hasta la semana pasada, el grupo español tenía el 57.43% de las acciones de la principal empresa petrolera argentina, en tanto que el 25.46% pertenecía del Grupo Petersen y el resto a pequeños accionistas.
El principal argumento de Fernández para promover la expropiación fue un supuesto incumplimiento de inversiones por parte de Repsol, lo que derivó en una brusca caída de las reservas y de la producción energética en el país sudamericano.
De acuerdo con los datos oficiales, la producción petrolera argentina se desplomó de los 43 millones metros cúbicos registrados en 2002, a los 33.2 millones alcanzados el año pasado.
Con estos niveles de producción, Argentina dejó de autoabastecerse y tuvo que comenzar a importar energéticos, en una crisis que tuvo su máximo nivel en 2011, cuando por primera vez en 17 años, el país tuvo un saldo deficitario energético de tres mil millones de dólares.