El rifle ruso AK-47 sobrevive a sanciones económicas
El fabricante de armas Kalashnikov no sabe de crisis. La economía rusa se hunde a causa de los bajos precios del petróleo y de las sanciones de países de Occidente, pero el fabricante de rifles AK-47 duplicó su producción el año pasado y registró ingresos por 3,000 millones de rublos (45 millones de dólares), 28% más en comparación con 2013, según datos de la compañía.
“A pesar de las sanciones, Kalashnikov reportó una ganancia neta por primera vez en siete años”, dijo el director general de Kalashnikov Alexei Krivoruchko en un comunicado enviado por correo electrónico a CNN.
El fabricante de rifles de asalto fue una de las primeras empresas rusas en sufrir las sanciones comerciales impuestas por la incursión en Ucrania.
Kalashnikov atribuyó el crecimiento al desarrollo de nuevos clientes, principalmente en Asia y África, y a una nueva estrategia de marketing adoptada en 2014.
La empresa lanzó una nueva marca dirigida a consumidores civiles, incluyendo ropa y accesorios, así como un nuevo eslogan: ‘Protecting peace’ o protegiendo la paz.
El ejército ruso y otras agencias de seguridad del país están entre los clientes más importantes de Kalashnikov , y realiza compras abundantes de nuevas armas.
Los departamentos nacionales de defensa y seguridad nacional fueron los únicos que se salvaron de los recortes presupuestarios ordenados por el presidente Vladimir Putin.
Rusia tiene planeado aumentar el gasto militar en un 85% entre 2012 y 2017. La compañía produjo 120,000 armas en 2014. Y prevé que la producción crezca hasta en 25% en 2015.