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La ciudad que queremos

La ciudad requiere una planeación multianual, pero contrasta con los objetivos de los políticos; desgraciadamente los gobiernos siempre planean con base en una visión cortoplacista.
jue 07 mayo 2009 03:49 PM

Paulatinamente, en el Distrito Federal renunciamos a la ciudad que queremos, para permitir la ciudad que tenemos: basta ver que la sociedad dejó a los gobernantes decidir los planes, las acciones
y las obras, sin conocer sus impactos positivos y negativos, y sin evaluar sus resultados.

El plan de desarrollo de una urbe difiere del objetivo personal de cada político: el primero es a largo plazo, mientras que el otro es a corto plazo y requiere que la gente vea rápidamente los resultados. No obstante, permanecemos indiferentes a sus caprichos y dejamos que los funcionarios planeen sin tomar en cuenta lo que ya está hecho o lo que realmente es necesario.

"Más sorprende que los habitantes no exijan una rendición de cuentas sobre lo hecho"

 

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La ciudad que queremos implica un programa que tenga continuidad pese a los cambios de los gobiernos, y que obligue a los dirigentes a realizar las acciones y obras necesarias, no sólo las que luzcan. Por eso, sorprende que cambien o pospongan el equipamiento, la infraestructura, el transporte público o las vialidades según determine el gobernante y el partido político en turno. Pero más sorprende que los habitantes no exijan una rendición de cuentas sobre lo hecho o que se dejó de hacer.

La metrópoli debe ser más segura, eficiente y atractiva, pero eso demanda la participación de la gente, para que se realicen acciones y obras respaldadas socialmente y que tengan recursos y tiempos definidos para su ejecución; implica que los trabajos que afectan el funcionamiento de grandes áreas de la ciudad se lleven a cabo sin interrupción hasta terminarlos y no, como sucede, que se suspenden durante las noches y los fines de semana; además, los proyectos largos y costosos requieren plazos que vayan más allá de una sola administración.

La ciudad que queremos no debe ser sólo una preocupación, sino la ocupación de todos nosotros.

*Arquitecto e investigador en temas de urbanismo.

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