Una ciudad plateada nace en Zacatecas
Cuenta la leyenda que el primer nombre que los colonizadores españoles pensaron para Zacatecas fue Argentina, por la cantidad de plata que escondía su subsuelo. Un país a mucha distancia se les adelantó, y finalmente el estado tomó su nombre actual del náhuatl: “Habitantes de la tierra donde abunda el zacate (un tipo de pasto)”.
El Gobierno Estatal actual lleva tres años planeando una nueva Zacatecas, y ahora sí, será una ciudad de plata, al menos en su nombre. Ciudad Argentum se levantará en la salida de la capital hacia Fresnillo, y será un desarrollo para cerca de 90,000 habitantes. La intención es que sea sede de todas las instalaciones de gobierno del estado, que permita el crecimiento ordenado de la capital, y que además fomente la creación de empleo (30,000) para frenar el éxodo masivo de la entidad (es la que mayor emigrantes expulsa cada año).
El nuevo desarrollo, que tardará en levantarse una década completa, tendrá de todo. Palacio de convenciones, campo de golf, parque temático, hoteles, cines, corporativos, comercios, instituciones educativas, centros hospitalarios y vivienda —de media a residencial plus.
Todo comenzó hace tres años, buscando nuevas zonas de desarrollo para la ciudad. Conscientes de que no podían ocuparse de las 1,000 hectáreas del proyecto, el Gobierno Estatal decidió compartir la responsabilidad. Eligieron a Empresazac, compañía creada para la ocasión por Manuel Muñoz, dueño de Minera Monarca, con instalaciones sin uso en la zona (la antigua Mina del Bote) y que ya cuenta con experiencia en el desarrollo de vivienda a través de Desarrollo Monarca.
Manuel Muñoz empezó en la minería, sector en el que estaba involucrada su familia, pero a los 30 años dio un giro a su carrera y entró en el mundo de la construcción, primero en empresas ajenas y luego de manera independiente. Creó el Grupo Monarca, con el que ahora piensa participar en el desarrollo de Argentum. La inversión prevista es de 2,000 millones de dólares (mdd), de los que nada más 200 serán para la urbanización del terreno. El convenio que firmó con el gobierno le obliga a reinvertir durante cinco años todas las utilidades que genere Minera Monarca, calculadas en 24 mdd brutos al año. En la mira tienen la construcción del parque temático, un hotel, un hospital o un corporativo, para luego rentarlos.
El tercer actor que participará en el desarrollo de Argentum es la corredora inmobiliaria CB Richard Ellis (CBRE), encargada de comercializar los terrenos a partir de noviembre. La firma, de origen británico y más 300 años de historia, es garantía de éxito. Cuenta con 400 oficinas en 58 países y poco más de 24,000 empleados. José Nacif, vicepresidente en México, explica que el interés que han visto entre diferentes grupos desarrolladores es alto, sobre todo para la zona comercial.
Un proyecto de oro
Ciudad Argentum toma su nombre de la abundante plata que hay en el estado. Sus creadores, sin embargo, lo definen como un proyecto de oro. Tiene en cuenta todos los elementos, incluso el relativo al ahorro energético. Argentum contará con su propio sistema de generación de energía eólica y fotovoltaica, instalaciones ocultas que embellezcan el paisaje y vialidades anchas que conecten con las principales arterias de la zona poblada.
Uno de los nichos que se pretenden explotar en Argentum es el de la salud. Habrá hospitales de especialidades a manera de cluster. El primer proyecto definido es el Hospital de la Ceguera, situado en la Ciudad de México y que atiende hoy a 250,000 pacientes al año.
Pretenden atender a la población que se instale en Argentum, pero también de Guadalajara, Aguascalientes, Durango, Monterrey, al millón y medio de zacatecanos que viven en EU y a los migrantes que pasen de camino a sus lugares de origen en vacaciones.
Se está negociando la instalación de una clínica de transplantes, que funcione como hospital universitario, una clínica de traumatología privada y una escuela de enfermería especializada en la atención a los adultos mayores completan el proyecto.
Argentum también tendrá espacio para el turismo. Su principal atractivo será, junto con el campo de golf, un parque temático sobre la minería en la actual Mina del Bote. Los visitantes recorrerán cuatro de los nueve niveles de la mina y habrá restaurantes, discotecas, una iglesia subterránea y talleres-tienda de artesanías.
Pero la verdadera ancla de Argentum es la Ciudad de Gobierno, que reunirá en el mismo espacio todas las instalaciones estatales, además de un Palacio de Convenciones de 10,000 m2 y los inmuebles del IMSS, ISSSTE o la Judicatura Federal. La Procuraduría General de Justicia y la Secretaría de Finanzas ya tienen su sede, y se está construyendo el Palacio de Justicia. Además de la ventaja natural para los usuarios, esta reubicación liberará mucho terreno en el centro histórico de Zacatecas, declarado Patrimonio de la Humanidad por las Naciones Unidas. Esto permitirá la ampliación de zonas peatonales y de ocio, con hoteles, teatros, galerías de arte, museos, restaurantes, tiendas o salas de cine.
A pesar de las bondades del proyecto, hay algunos detractores. Uno de los principales riesgos, explica Sergio Flores, coordinador de la licenciatura de Urbanismo de la UNAM, es que funcione sin coordinación con el centro. “Serían construcciones imaginarias”. Es importante que se trabajen bien las vialidades, algo que, según los involucrados, se está contemplando ya.
Pero Arnoldo Rodríguez, diputado de la Comisión Legislativa de Desarrollo Económico del Estado, disiente. El representante del Partido Acción Nacional (PAN) —de oposición—, al hacer alusión a Argentum, dice que es un proyecto “mal planeado y diseñado al vapor”, porque según él, no cuenta con análisis previos integrales.
Ramón Medina, delegado federal de la Secretaría de Desarrollo Social, no está de acuerdo. Argentum, para él, cambiará la geografía zacatecana. “Tiene que ser la punta de lanza del desarrollo del estado”.