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¿Por qué tu hijo es ‘chaparrito’?

A veces la altura de un niño se está viendo frenada por una cuestión hormonal, dice Armando Blanco; hay maneras para determinar si su desarrollo es natural o se ha detenido por cuestiones de salud.
vie 30 abril 2010 06:01 AM
Un médico endocrinólogo te ayudará a diagnosticar algún posible problema de crecimiento. (Foto: Jupiter Images)
nino estatura pequeno hijo 1 (Foto: Jupiter Images)

Los niños de baja estatura que son objeto de burla, hostigados, discriminados y víctimas de abusos, tanto en la escuela como en la familia, por ser "chaparritos", sufren en silencio, tienen problemas de aprendizaje, son hiperactivos , se deprimen con facilidad o reaccionan aislándose. Pero siempre el calificativo impacta de manera negativa en su calidad de vida.

Aunque la talla baja por Deficiencia de la Hormona de Crecimiento (DHC) suele confundirse con mitos como "si el padre es bajo de estatura, el hijo también lo será" o "aunque el niño no esté creciendo, algún día dará el estirón", la realidad es que la falta de esa hormona es responsable del 80% de los casos en el mundo.

Uno de cada 3,500 niños a nivel mundial padece baja estatura por Deficiencia de Hormona de Crecimiento. Y el 20% la sufre por otras causas patológicas, como mala alimentación, poco ejercicio, problemas del corazón , de los riñones o del  Síndrome de Turner (en las niñas) y del Síndrome de Prader-Willy (en los niños).

Y es que la hormona de crecimiento debe enviar una señal a todos los órganos y sistemas del cuerpo para crecer y de esta manera mantener una talla y estatura correspondiente a la edad del niño. Es el mensajero químico de la glándula pituitaria, que se encuentra en el cerebro, el cual estimula el crecimiento durante la infancia y en la etapa adulta ayuda a mantener la vitalidad, la densidad ósea, así como la masa muscular y la fuerza.

Cuando no lo hace, el niño no produce las cantidades adecuadas de esta hormona y se observa un retraso en la velocidad de crecimiento y en el desarrollo de los huesos. La deficiencia puede estar presente desde el nacimiento o detectarse durante la infancia y la pubertad.

El problema en la hormona de crecimiento es frecuente, pero debido al  desconocimiento de padres de niños que la padecen, no se atiende, lo que resulta desfavorable para el infante, pues su adecuado crecimiento es indicador de su salud física, emocional y social .

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En estos tiempos de crisis, cuando ambos cónyuges dedican más tiempo a sus trabajos que a sus hogares, muchos piensan que los hijos sufren cierto abandono y que, por ende, su calidad de vida se ve afectada de manera negativa y pueden terminar víctimas del síndrome del "niño chaparrito".

Pero, si ambos padres se aseguran de que sus hijos tengan una buena calidad de vida, no importa si los dos trabajan de tiempo completo. Que los dos padres trabajen ayuda a que sus hijos tengan un mejor ingreso, una mejor educación, más recreación y ejercicio; en resumen, una mejor calidad de vida ,  es bueno para el adecuado crecimiento del infante.

Lo que sí impide que el niño produzca una adecuada cantidad de DHC es la "deprivación emocional" que podría resultar cuando ambos padres trabajan, cuando sólo uno labora fuera del hogar o cuando ninguno de los dos trabaja.

Lo importante es preocuparse por la calidad de vida del infante.

¿Cuándo sabemos que un niño es víctima de DHC?

El síntoma principal de la deficiencia de la hormona del crecimiento es un notable crecimiento lento (menos de cinco centímetros por año), aun cuando el infante mantiene proporciones corporales normales. Pero el niño que padece deficiencia de la hormona del crecimiento puede presentar:

  • Un rostro inmaduro, es decir, de aspecto mucho más joven que el de sus pares.
  • Una contextura física rellena.

Es importante señalar que la deficiencia de la hormona del crecimiento no afecta la inteligencia y que cada niño experimenta los síntomas de manera diferente. Los síntomas de la deficiencia de la hormona del crecimiento pueden parecerse a los de otras condiciones o problemas médicos. Siempre consulte al médico de su hijo para el diagnóstico.

¿Cómo se diagnostica la deficiencia de la hormona del crecimiento?

Antes de diagnosticar la deficiencia de la hormona del crecimiento, el médico de su hijo deberá descartar otros trastornos como enfermedad sistémica, incluyendo deficiencia de la hormona tiroidea. Además del examen y el historial médico completo, los procedimientos para diagnosticar la deficiencia de la hormona del crecimiento pueden incluir:

- Monitorear la velocidad de  crecimiento del niño durante un periodo de tiempo.

- Comparar la estatura del niño en las tablas de referencia para su edad y sexo así como la talla promedio de los padres y su referencia étnica.

- Determinar los niveles de hormona de crecimiento tanto en reposo como ante una prueba de estimulación.

- Revisar los antecedentes de la gestación, el trabajo de parto y el alumbramiento.

- Radiografías de huesos (mano y muñeca) para determinar la edad ósea - energía electromagnética utilizada para producir en una placa imágenes de los huesos y órganos internos (para determinar la madurez ósea y el potencial de crecimiento).

¿Cómo ayudar a los niños con baja estatura?

El médico de su hijo determinará un tratamiento específico para la deficiencia de la hormona del crecimiento basándose en:

- La edad de su hijo, el estado general de salud y su historial médico.

- Qué tan avanzada esté la condición.

- La tolerancia de su hijo a determinados medicamentos, procedimientos o terapias.

- Las expectativas para la trayectoria de la condición.

- Su opinión o preferencia basada en su experiencia.

Una vez diagnosticada la deficiencia de la hormona del crecimiento, el tratamiento para el trastorno incluye inyecciones de hormona del crecimiento en forma regular (algunos niños reciben inyecciones diarias, mientras que otros las reciben varias veces por semana).

Generalmente, el tratamiento dura varios años, aunque los resultados a menudo se pueden empezar a  ver a los tres o cuatro meses del inicio de las inyecciones.

Si nota que su hijo no crece de acuerdo a la edad que tiene o deja de hacerlo, es importante acudir con el endocrinólogo pediatra, quien podrá proporcionar una evaluación certera según los parámetros internacionales que marcan las tablas de velocidad de talla, en las que se muestra el patrón de crecimiento normal de los niños y niñas dependiendo de su edad.

Cuanto antes se inicie el tratamiento de la deficiencia de la hormona del crecimiento, mayores posibilidades tendrá el niño de alcanzar una estatura adulta normal o casi normal. Cuando se atiende desde los 3 y 5 años, es más fácil que el niño llegue a tener una estatura ideal.

El autor es pediatra endocrinólogo Integrante de la Academia Nacional de Pediatría en México.

Aréa de Hospitales y Especialidades de Pfizer

www.llegandoalto.com.mx

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