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Si compras un negocio, estúdialo antes

Con una economía en recuperación, el valor de las empresas aumenta, opinan expertos de KPMG; los interesados deben tener en cuenta tres reglas básicas al embarcarse en una transacción así.
mié 27 julio 2011 06:03 AM
Tanto compradores como vendedores deben tomar en cuenta el valor de un negocio a través de información confiable. (Foto: Photos to Go)
acuerdo comercial corporativo fusion (Foto: Photos to Go)

Considerando la situación actual de la economía y la recuperación de la confianza, es razonable augurar un incremente significativo respecto del año 2010. Si se requieren incentivos, la economía mexicana los ofrece a través de una divisa fortalecida y un dólar que, en marzo pasado, apenas cotizaba por encima de los 12.15 pesos. Ni siquiera la inseguridad ha sido freno para las iniciativas. Con datos preliminares, en febrero la Secretaría de Economía estimó que la inversión extranjera directa de 2010 superó los 17,000 millones de dólares (mdd ), es decir 16.6% más que en 2009.

La escasez de recursos bancarios para financiar la operación de las empresas, la volatilidad en los mercados y los problemas de crecimiento en la mayor parte de los sectores económicos, están creando un ambiente favorable para las fusiones y adquisiciones, en el que las empresas con liquidez y acceso a recursos podrían tomar ventaja de sus rivales más débiles y adquirirlos a valores atractivos. En el 2010, en nuestro país se anunciaron transacciones por 16,000 mdd, una cifra mayor al promedio de los últimos 10 años, que fue de 11,300 mdd; las estimaciones para 2011 sugieren que es buen momento para informarse sobre los procesos estructurados de compra de negocios.

En México hay muy buenos ejemplos de operaciones de compra y venta de empresas en la industria de la construcción, farmacéutica y del cuidado personal, así como de la salud, educación, entre otros. Las empresas interesadas en realizar una transacción deberán evaluar su situación y sus posibilidades de convertirse en comprador o vendedor, considerando que cualquiera de estas posiciones puede tener ventajas: una empresa familiar con potencial de desarrollo pero sin acceso a recursos puede dar un salto cualitativo al fusionarse o ser adquirida por otra de más tamaño, o bien por un inversionista que busque fondearla.

Las empresas no deberían permanecer estáticas, esperando en forma pasiva por un inversionista que podría no llegar. Pueden hacer mucho para consolidar su posición, transparentar su potencial, lucir sus méritos y en general, elevar el atractivo y por lo tanto el precio que podrían obtener. Algo similar, pero en sentido opuesto, aplica para quienes están interesados en adquirir a sus competidores u otro negocio que mejore o complemente su posición en el mercado.

Tres pasos para la compra de una empresa

1)      Parece una buena idea- El proceso inicia con el análisis de la estrategia corporativa y la forma de alinear el plan de negocio con la empresa objetivo (target). Durante este paso se deberán realizar actividades como entender las necesidades de los clientes, conocer el desempeño histórico de las unidades de negocio y establecer la forma de acercarse y definir los términos del proceso de compra-venta, entre otras.

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2)      Durante la transacción- Una vez que los accionistas (comprador y vendedor) han llegado a un acuerdo para la compra-venta de un negocio, el siguiente paso es obtener acceso a la gerencia a través de un cuarto de datos (dataroom) electrónico o físico. Esto se hace con el objetivo de confirmar los atributos del plan de negocios, confirmar si el desempeño histórico es congruente con las proyecciones, identificar sinergias que permitan agregar valor a la transacción, y asegurar que el comprador está al tanto de todas las obligaciones y compromisos.

3)      Cerrando la transacción - En este momento se concreta la negociación y se incluyen las revelaciones del vendedor, los mecanismos de ajuste del precio y de resolución de conflictos, incluso la parte del precio que podría ser reservada para el caso de que se presente alguna contingencia atribuible al vendedor. 

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Fuente: KPMG

Nota: Este es un ilustrativo de carácter general y no constituye consultoría legal, fiscal o profesional.

En conclusión, para conseguir vender al mejor precio, los empresarios deben preparar la información contable, fiscal y laboral que revele el valor de sus negocios. Algo equivalente aplica para los compradores, que deben investigar y evaluar el valor, competencias y sinergias de la empresa objetivo, lo que se facilita a través de un proceso estructurado que requiere del análisis y una serie de estudios que ayuden a confirmar el impacto de la adquisición e integración del negocio (due diligence), realizado por profesionales.

* Los autores son socios y Asesores de Transaction Services de KPMG en México.

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