OPINIÓN: Seguros para deportistas, una protección para una frágil profesión
Nota del editor: Igal Rubinstein es socio director de 4P/MX, responsable de la operación de Seguros S, compañía de tecnología pionera en México en vender seguros por internet. Las opiniones expresadas en este artículo son responsabilidad de su autor.
(Expansión)— Cuando escuchamos la palabra seguros, es muy probable que lo relacionemos con conceptos como auto, salud y hogar, pero en realidad existen diversos tipos de seguros que desconocemos, aún cuando muchos de éstos son de gran apoyo; por ejemplo, hay seguros para bodas, mascotas, bicicletas, e incluso también se pueden asegurar algunas partes del cuerpo.
En el contexto de los Juegos Olímpicos, escuchamos historias de muchos atletas de alto rendimiento que se han preparado desde muy pequeños para poder llegar a este gran evento y esto se debe, en gran parte, a que su vida ha estado enfocada en entrenamientos y competencias. Usain Bolt, por ejemplo, desde los 12 años fue el corredor más rápido de la escuela y ha luchado incansablemente para llegar hasta donde se encuentra.
Hablando de este gran atleta, hace un año, al terminar una competencia en el Mundial de Atletismo, el flash humano sufrió un altercado tras ganar el oro en los 200 metros, pues al estar celebrando su victoria, un camarógrafo accidentalmente lo arroyó con un scooter. Afortunadamente no pasó a mayores y posteriormente Bolt bromeo que tendría que asegurar sus piernas.
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Sin embargo, este comentario en realidad tiene gran valor, pues al ser el deporte la principal profesión de un atleta es importante que cuenten con un respaldo económico ante la posibilidad de que un accidente suceda y dañe alguna parte de su cuerpo, pues sabemos que al realizar algún tipo de deporte existe el riesgo de presentarse alguna lesión que pueden llegar a afectar gravemente la condición física del deportista.
En países como Estados Unidos, la industria aseguradora ha creado una cobertura llamada “disability”, que traducida al español significa "invalidez", donde en caso de que una persona pierda o se dañe temporalmente alguna parte del cuerpo que es fundamental para trabajar, el seguro paga al asegurado el monto establecido, el cual contrató.
El costo de estos seguros es muy variable pues depende de varios factores como la función de la parte del cuerpo asegurada y el riesgo que la aseguradora calcule sobre dicha parte del cuerpo. Además, las compañías aseguradoras establecen ciertos criterios para evitar que el siniestro sea provocado, es decir, que el asegurado esté motivado económicamente para autolesionarse.
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Existen varios ejemplos de deportistas que han requerido esta protección; por ejemplo, en el futbol, Cristiano Ronaldo y Lionel Messi han asegurado sus piernas por 100 y 50 millones de euros. En otros deportes, como la Fórmula 1, algunos pilotos también han buscado proteger partes de su cuerpo, como es el caso de Fernando Alonso, quien aseguró sus dedos pulgares por 10 millones de euros, pues los identifica como esenciales en la conducción. También, otra cuestión se dio en basquetbol, cuando la Federación Española de Baloncesto tuvo que asegurar los tobillos y el peroné del basquetbolista Jorge Garbajosa.
nullDe forma adicional, se recomienda que los deportistas también estén protegidos con un seguro de gastos médicos mayores, el cual cubre los gastos por hospitalización, estudios de laboratorio, honorarios médicos, además de ser un gran apoyo para tratar lesiones menores, por ejemplo, terapias por una torcedura, cirugías de rodillas, entre otros, obteniendo también una protección ante enfermedades graves.
Como podemos ver, la industria aseguradora cuenta con diferentes soluciones para proteger de cierta manera nuestra fuente de empleo. Es importante que los deportistas analicen el valor que representa estar protegidos ante una eventualidad que ponga en riesgo su carrera deportiva. Un seguro es una inversión no un gasto innecesario como muchos lo ven, pues siempre estar asegurado es mucho mejor que no estarlo y sobre todo si en nuestra profesión el riesgo está siempre presente.
