Una mutación del virus aviar H7N9 lo hace proclive al contagio humano
Una nueva variante de la gripe aviar que la Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que ha causado al menos 11 muertes en China tiene características genéticas que la hacen adaptable a infectar a las personas.
En un informe publicado este jueves en el New England Journal of Medicine, las muestras médicas de tres pacientes —que murieron de la enfermedad— tenían mutaciones que han sido detectadas anteriormente como proclives al contagio y que ayudan a que el virus crezca en el tracto respiratorio de un mamífero.
El análisis llega en medio de la aparición de contagio a humanos desde finales de marzo. Este viernes, China informó de cinco nuevos casos confirmados por un laboratorio de la cepa H7N9 de esta gripe aviar, elevando el total a 43 personas contagiadas.
La cepa se encuentra normalmente en las aves, y hasta el mes pasado nunca se supo que infectaba a las personas.
"La situación H7N9 está evolucionando muy rápidamente", dijo Nancy Cox, director de la División de Influenza de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos. "Una cosa que preocupa es el ritmo que estamos viendo en la identificación de los casos”.
En un tono más tranquilizador, los investigadores no han encontrado pruebas de que el virus se transmita directamente de persona a persona. Más de un millar de "contactos cercanos" de los pacientes están siendo monitoreados por las autoridades de salud chinas , según la Organización Mundial de la Salud.
Una mutación relacionada, conocida como Substitución Q226L, fue encontrado en dos de las tres primeras víctimas.
Experimentos anteriores han demostrado que los virus tienen más probabilidades de infectar hurones, que son comúnmente utilizados en la investigación contra la gripe, incluida la gripe aviar H5N1. La misma mutación también se encontró en los virus que causaron las pandemias de 1957 y 1968 de la influenza.
Una segunda mutación, conocida como PB2 E627K, fue encontrada en las tres muestras del virus recolectadas.
Según el doctor Ron Fouchier, virólogo holandés, esta mutación permite que el virus se reproduzca a temperaturas mucho más bajas que un virus de influenza aviar estándar. El cambio deja que crezca en un tracto respiratorio humano, que es más frío que el hogar natural del virus: el tracto gastrointestinal de un ave.
Los primeros tres pacientes identificados son un hombre de 87 años y un hombre de 27 años, de Shanghai, y un ama de casa de 35 años, de Anhui.
La mujer había visitado un mercado de pollos alrededor de una semana antes de caer enferma. El joven era un carnicero que trabajaba en un mercado donde se vendían aves vivas, aunque no manejaba la carne. El hombre de 87 años no tenía ninguna exposición conocida con las aves vivas.
Los tres murieron después de sufrir severos síntomas respiratorios, incluyendo el síndrome de dificultad respiratoria aguda, shock séptico y eventualmente una falla orgánica múltiple.
El CDC está en las etapas finales de refinar una prueba de diagnóstico para identificar el virus H7N9 en los pacientes, la cual debería estar disponible para su distribución en cuestión de días, según Cox.
Una prueba de diagnóstico disponible permitiría una identificación más rápida de los pacientes que realmente tienen la infección, y también ayudaría a detectives de enfermedades sobre la cantidad de personas que están siendo expuestas.