La región fronteriza norte y sur de México es considerada una zona conflictiva, donde las noticias sobre la inseguridad y los problemas migratorios se llevan las primeras planas. El Programa de Apoyo a la Zona Fronteriza constará de seis iniciativas sin embargo, hay que recordar que se trata también de un importante paso para las empresas que sostienen relaciones comerciales con Norte, Centro y Sudamérica.
Conformada por los estados de Baja California, Baja California Sur, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas en el norte, y por Campeche, Chiapas, Quintana Roo y Tabasco en el sur, la región alberga a 27% de la población nacional y genera 35% del Producto Interno Bruto (PIB). Por tanto, hablamos de un territorio ávido de nuevas políticas que mejoren el entorno económico y brinden garantías para un comercio justo.
Bajo esta premisa, en días pasados el presidente Enrique Peña Nieto anunció un apoyo de $30,000 millones a favor de la zona fronteriza -cinco de las cuales impulsarán el desarrollo económico de las empresas que ahí ya operan- y tiene por objetivo mitigar el impacto ante la homologación del IVA a 16% en la región a partir del 2014.
La primera acción consiste en la desaparición de 12 garitas en Sonora, Chiapas, Tamaulipas y Chihuahua que, más allá de un filtro, se convirtieron en un obstáculo para la actividad comercial y el ingreso del turismo. En segundo lugar, se beneficiará con $2,500 millones a 240,000 familias marginadas. La tercera acción consistirá en invertir $500 millones en garantías de la Banca de Desarrollo para otorgar créditos hasta por $5,000 millones a Pymes, principalmente a exportadoras, maquiladoras y enfocadas a brindar servicios turísticos.
Mientras que la cuarta iniciativa consiste en impulsar al sector turístico y posicionar a los estados fronterizos del norte como un destino amigable con el ciudadano hispano radicado en Estados Unidos, la quinta pretende vigilar el correcto comportamiento de los comerciantes a fin de que no incrementen injustamente los precios en la frontera a propósito de la incorporación del 16% de IVA. Incluso, se habla del programa "En 30" que autoriza a la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) para hacer inspecciones en menos de 30 minutos al comercio que abuse del cliente.
Por último, se contempla una inversión de $21,800 millones para obras y proyectos de infraestructura en todos los estados fronterizos, conforme a lo aprobado en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2014. De los estados mencionados, Chihuahua será el primero en beneficiarse con esta estrategia de desarrollo fronterizo. Y así, México pronto aspirará a una frontera con la infraestructura, marco legal, seguridad y estabilidad necesarios para invitar a los inversionistas a realizar operaciones comerciales y a los emprendedores a iniciar su negocio.
La zona fronteriza hoy se presenta como un lugar idóneo para establecer relaciones comerciales duraderas y justas. De ahí la necesidad de las empresas mexicanas de contar con el apoyo, desde económico hasta operativo, de instituciones financieras con amplia experiencia en comercio exterior. Solo así los esfuerzos del gobierno federal podrán alcanzar su máximo potencial. El éxito es de quien acepta el reto, ¿su empresa está lista?