Seis países de Europa actuarán contra Google por la protección de datos
Alemania, España, Francia, Italia, Holanda y Reino Unido emprenderán acciones represivas contra el gigante estadounidense de internet Google debido a que concluyó el periodo de cuatro meses que le habían dado para modificar sus reglas de confidencialidad, informó la la Comisión Nacional francesa de Informática y Libertades (CNIL).
Varios organismos de protección de datos le exigieron a Google adecuar sus reglas de confidencialidad a la normativa europea y facilitar información clara y precisa sobre los datos que el gigante de internet ha recabado hasta ahora, lo que Google no hizo.
Google fusionó en marzo de 2012 cerca de 60 reglas de uso que antes estaban separadas y reagrupó información procedente de sus distintos servicios, como el de correo electrónico Gmail o la red social Google+. Argumentó que de esa manera simplificaba su política de confidencialidad.
Los países europeos habían pedido a Google que precisara la duración máxima de conservación de los datos y su finalidad, y que mostrara su compromiso de respetar "los principios esenciales de la directiva sobre protección de datos personales".
En opinión de estos países, Google no proporciona a los usuarios información sobre qué tratamiento da a sus datos, cómo los combina y las categorías de datos que gestionan.
Hasta ahora, Google no ha satisfecho ninguna de las exigencias que se le hicieron. La CNIL francesa precisó que, si bien los seis países están de acuerdo en emprender acciones represivas, le corresponde a cada autoridad nacional aplicar las medidas que considere apropiadas, entre las que se incluyen nuevas investigaciones o controles.
La CNIL tiene capacidad sancionadora con multas que pueden alcanzar un máximo de 150,000 euros (unos 192,000 dólares) o de 300,000 euros en caso de reincidencia (385,000 dólares).
En el caso de la agencia francesa, que hizo pública la decisión conjunta, desde París se ha notificado a Google que se abrirá un "procedimiento de control", así como otro de cooperación administrativa internacional con el resto de homólogos del grupo de trabajo.
La decisión adoptada este martes es un paso más en la lucha de los organismos europeos de protección de datos reunidos en el llamado Artículo 29 o G29 para hacer que Google se pliegue a las exigencias comunitarias.
Las agencias enfrentadas con Google consideran que la firma estadounidense no precisa qué datos personales recupera a través de su buscador de internet ni las finalidades exactas para las que recolecta esas informaciones.
Señalan, incluso, que Google no diferencia entre "el tratamiento de un contenido anodino sobre una búsqueda y el número de una tarjeta de crédito o las comunicaciones telefónicas del usuario".
Por ello, recomendaron a Google que instaurase un sistema con tres niveles de detalle, con el fin de que se adaptara a los requisitos de la normativa comunitaria en vigor.
Las agencias constatan que la combinación entre datos personales y servicios se ha generalizado con las nuevas normas de Google y que cualquier actividad en línea que esté vinculada al buscador, como puede ser el uso de sus servicios, de su sistema operativo Android o la consulta de sitios de internet que emplean sus servicios, se puede recopilar y combinarse.
Y agregan que esas combinaciones tienen finalidades diferentes a la del servicio solicitado por el usuario de Google, como el desarrollo de nuevos productos, la seguridad, la publicidad, la creación de una cuenta Google o la investigación académica.