iPhone, un historial de fallas de generación en generación
Los nuevos dispositivos de Apple sufren una gran resaca que se ha acentuado con las quejas de los usuarios tras la magna celebración de su lanzamiento en semanas pasadas.
A unos días de haber festejado la cifra récord en ventas de 10 millones unidades, la firma de Cupertino ahora enfrenta una ola de reclamaciones por parte de sus clientes ante las fallas de sus nuevos dispositivos.
Recientemente los usuarios han reportado que el iPhone 6 Plus tiene una debilidad física que provoca que éste se doble, además de que el sistema iOS 8 tiene una falla que derivó en el desarrollo prematuro de una actualización, el iOS 8.0.1, que desactiva varias funciones importantes del teléfono como el sistema de identificación de huella Touch ID y la conexión a WiFi.
La firma tecnológica ha pedido a los usuarios que vuelvan a instalar el iOS 8 e informó que se encuentra trabajando en el iOS 8.0.2 para solucionar el resto de los defectos en el software.
No es la primera vez que Apple sortea los lamentos de sus usuarios, aquí un recuento de la historia de fallas que ha pasado de generación en generación.
Del primero, ¿se aprende?
La primera generación del iPhone sin duda revolucionó el mundo de la telefonía. Por el año de 2007, BlackBerry todavía reinaba en la gama de los smartphones, hasta que llegó Apple con un dispositivo que en lugar de tener un pequeño teclado incluyó una pantalla táctil.
El primer iPhone conquistó al mundo por su diseño más que por sus funciones, ya que fallaba en varias aplicaciones indispensables en las que BlackBerry dominaba como el uso del correo electrónico. Además tampoco era ideal para realizar cosas sencillas como grabar videos, personalizar sonidos o almacenar archivos.
iPhone 3G fue mejor, pero…
El sucesor del primer iPhone mejoró en funcionalidad y sorprendió al ser compatible con la tercera generación de red móvil que le dio su nombre.
El iPhone 3G venía acompañado con el iOS 2.0.2 y una serie de fallas que desató muchas inconformidades entre los usuarios. Esta fue la primera vez que un teléfono de Apple perdió la señal debido a que el software no era del todo compatible con la red, según dijo la compañía en ese entonces.
Lo que sucedía es que al intentar realizar una llamada era muy probable que el teléfono cambiara de 3G a Edge, es decir, a una menor potencia de recepción .
Entre otras quejas destacaron también la lentitud del sistema y la conexión a Internet.
El antennagate
El iPhone 4 y 4S fueron de los últimos proyectos que el fallecido Steve Jobs desarrolló en vida, y con ellos Apple enamoró a sus seguidores una vez más.
La gran novedad, además de la serie de funciones que presume la compañía con bombo y platillo cada año, fue la posibilidad de elegir entre dos colores: el blanco y el negro.
Una vez más el iPhone se agotó y la oleada de críticas no tardaron en llegar. El iPhone 4 tenía un defecto que provocaba la caída de la recepción en el dispositivo cuando el usuario posicionaba su mano cerca de la antena que rodeaba al teléfono.
En su momento, Apple ofreció una solución parcial al problema y una funda de regalo para los usuarios.
Un iPhone sobrecalentado
La quinta generación del iPhone supuestamente diseñada todavía por Jobs, según señala The Guardian, destacó por la modificación a su tamaño, un nuevo diseño que incluía acabados plateados, así como el surgimiento de una versión barata con el 5C.
Los nuevos modelos fueron recibidos con emoción por los fanáticos de Apple, pero tiempo después surgiría un detalle en la batería con las versiones 5 y 5S.
Los usuarios comenzaron a quejarse de la poca duración de la batería así como un sobrecalentamiento de la parte trasera del teléfono relacionado con dicho componente, por lo que Apple tuvo que llevar a cabo un programa para remplazar esta parte.
La compañía ya en ese entonces liderada por Tim Cook también realizó un llamado a revisión para cambiar el botón de encendido de estos dispositivos por otra falla detectada.