7 formas en que los Juegos Olímpicos de 1968 cambiaron a México

(Expansión) - El 12 de octubre de 1968 se inauguraron los Juegos de la XIX Olimpiada en medio de un México convulsionado por el movimiento estudiantil ocurrido 10 días antes y que culminó con el asesinato de decenas de jóvenes. En el país no se sentía el ambiente festivo tradicional del evento que reúne las principales disciplinas deportivas en el mundo, según las anécdotas de los contemporáneos de la época.

Quedó en entredicho que para evitar la cancelación del evento, el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz justificó la agresión del 2 de octubre. En pocos días desapareció el ánimo entre los mexicanos, pero los preparativos continuaron y el país recibió a atletas, entrenadores y fanáticos, pues durante años se esperó el momento.

Este 2018 se cumplen 50 años del inicio de los Juegos Olímpicos que marcaron un parteaguas en la historia del país y que provocaron una transformación en ámbitos como el económico, social y de infraestructura. Aquí te los mostramos.

1. Fueron los primeros en llevarse a cabo en América Latina y celebrados por una nación en vías de desarrollo. De hecho, México fue pionero en el establecimiento de nuevas reglas dentro de las competencias, como el inicio del control antidopaje y de actividad sexual.

La ubicación de la Ciudad de México resultó un problema para los deportistas participantes, ya que requirieron un esfuerzo mayor debido a los 2,300 metros sobre el nivel del mar a los que se encuentra la capital mexicana.

2. A partir de que México fue seleccionado para albergar las competencias deportivas surgió la idea de crear la llamada Ruta de la Amistad, con el propósito de establecer una olimpiada cultural en el país. En 1968 se colocaron 19 esculturas distribuidas a lo largo de 17 kilómetros del Anillo Periférico. Se contó con la participación de los arquitectos Pedro Ramírez Vázquez y Mathias Goeritz, así como de artistas provenientes de Australia, Japón, Holanda, Polonia, España, entre otros.

Actualmente estas esculturas se encuentran en peligro debido a su desgaste natural, por lo que algunas se reubicaron e incluso el Patronato Ruta de la Amistad A.C. promueve la adopción de estas obras de arte por parte de instituciones civiles.

3. La atleta Enriqueta Basilio se convirtió en la primera mujer en llegar al pebetero y encender la llama olímpica el 12 de octubre de 1968 en el Estadio Olímpico Universitario, donde se llevó a cabo la inauguración. "A partir de entonces hubo muchos cambios para las mujeres, por nuestros derechos, por la justicia, por la igualdad, por la solidaridad y todos los valores que representa el respeto de una mujer", comentó en una reciente entrevista para la UNAM.

4. Se destinaron 84 millones de pesos provenientes del gasto federal y más de 75 millones de inversión privada como parte del presupuesto para remodelación y construcción de recintos deportivos.

5. Uno de los ámbitos que más destacaron dentro de los Juegos de la XIX Olimpiada fue la arquitectura de los inmuebles que se estrenaron ese año: El Gimnasio Olímpico Juan de la Barrera, el Polígono Olímpico de Tiro, la Alberca Olímpica Francisco Márquez, la Sala de Armas, el Velódromo Olímpico Agustín Melgar, la Pista Olímpica de Remo y Canotaje, y el Palacio de los Deportes.

En 1967 comenzó la edificación de la Unidad Habitacional Villa Olímpica Libertador Miguel Hidalgo, un conjunto de 29 torres con habitaciones que albergaron a los deportistas, federaciones internacionales, entrenadores y a la prensa. Después de terminado el evento, los departamentos fueron vendidos para quien decidiera habitarlos y hasta la fecha perdura su existencia.

6. Durante las competencias, llevadas a cabo del 12 al 27 de octubre, México quedó en onceavo lugar del medallero, con un total de 9 preseas: 3 de oro, 3 de plata y 3 de bronce.

7. En las dos semanas que duraron las competencias se rompieron diversos récords deportivos en disciplinas como atletismo, tiro deportivo, ciclismo, halterofilia, entre otras. Ese año fue la primera vez que se utilizó tartán en las pistas de atletismo, hecho que influyó positivamente en los resultados de los corredores.

El récord con más impacto entre los aficionados fue el salto de longitud de 8.9 metros impuesto por Bom Beamon. De igual forma Wymonia Tyus se convirtió en la primera atleta en ganar la competencia de los 100 metros dos veces y Dick Fosbury ganó presea por salto de altura en la rama varonil con un nuevo estilo –el ahora conocido como "Fosbury Flop"-.