Honduras y Brasil, en tensión por Zelaya
La diplomacia brasileña realiza desde el martes intensas consultas y se mantiene a la expectativa por la crisis que generó la presencia Zelaya, en su embajada en Tegucigalpa .
El llamado a entregar a Zelaya para que sea juzgado por la justicia de su país, formulado por el gobernante de facto hondureño, Roberto Micheletti, es evaluado por Brasil, país que no reconoce al gobierno de Honduras, señalaron fuentes brasileñas.
Zelaya fue derrocado el 28 de junio tras lo cual el Congreso designó a Micheletti al tiempo que la justicia de Honduras emitió órdenes de arresto contra el presidente derrocado por presuntas violaciones de la Constitución.
El diario Folha de Sao Paulo reprodujo este martes parte de la carta de Micheletti en la que se establece que hay una especie de injerencia (de parte de Brasil) en los asuntos internos de los hondureños.
El texto señala que la provocación es contraria a las normas del derecho diplomático, "y el gobierno brasileño es directamente responsable de los actos de violencia que pueden ocurrir allí".
Pero el gobierno de Luiz Inácio Lula Da Silva ha sido enfático en la defensa de la reinstalación de Zelaya en el poder y dijo que permitió su entrada en la embajada en Tegucigalpa después de haber recibido una solicitud de sus representantes.
Por su parte, la Jefa de Gabinete, Dilma Rousseff, dijo que la entrada del depuesto presidente de Honduras Manuel Zelaya a la embajada de Brasil en Tegucigalpa no significa que recibió apoyo del Gobierno brasileño para hacerlo.
"El hecho de que haya entrado no significa en ningún momento que Brasil incentivó, adoptó, dio cobertura ni nada de eso, simplemente respetó", declaró la ministra a la prensa.
"Eso es derechos humanos elementales", añadió.
El ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Celso Amorim, quien se encuentra en Nueva York para asistir a la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), dijo que Zelaya está ahora bajo la protección de Brasil.
"No creemos que el gobierno interino de Honduras hará una violación flagrante del derecho internacional contra la embajada de Brasil", anotó al confiar que el regreso de Zelaya represente un "nuevo paso" en las negociaciones con el gobierno interino.
Según el canciller, "las autoridades brasileñas entraron en contacto con la Organización de Estados Americanos, el gobierno de Estados Unidos y otras autoridades internacionales que tienen que ver con el gobierno de Honduras para pedir que sean razonables".
Zelaya fue derrocado en la madrugada del 28 de junio, cuando planeaba colocar una cuarta urna en los comicios para preguntar a la ciudadanía si estaba de acuerdo en convocar a un referendo para reformar la Constitución y poder ser reelecto presidente.
Los militares, con el apoyo de la Corte Suprema y el Congreso, echaron a Zelaya del país bajo el argumento de pretendía violar la Constitución, tratando de pasar por encima de la cláusula que impide la reelección en el país, lo que es negado por el presidente Zelaya.
Paraguay pide su restitución
La cancillería emitió un comunicado pidiendo al gobierno de facto de Honduras la inmediata reposición de Manuel Zelaya en el cargo de presidente.
"Paraguay exige al gobierno de facto de Honduras que tome las medidas necesarias para asegurar la vida y la integridad física del presidente Manuel Zelaya quien se encuentra en la sede de la embajada del Brasil en Tegucigalpa", señaló el documento.
Recomendó "a todas las fuerzas vivas de Honduras a no tomar acciones que pudiesen desembocar en hechos de violencia e insta a recurrir al diálogo para lograr la restauración de la institucionalidad a fin de que el Presidente Zelaya complete el mandato constitucional para el cual fue legítimamente electo por el pueblo hondureño".
Con información de Notimex, Reuters y AP.
