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No creo en el radicalismo ni en la confrontación permanente: Aureoles

El nuevo gobernador de Michoacán dice que sus primeras acciones serán solventar las fallas en las finanzas, la educación y la seguridad
jue 01 octubre 2015 07:10 AM

Enfrentar el problema de las finanzas públicas y mejorar la seguridad son dos retos con los que Silvano Aureoles asume este jueves el gobierno de Michoacán, un estado que lucha por salir de la violencia y la crisis de inseguridad provocadas por la delincuencia organizada y los grupos de autodefensa.

En entrevista con CNNMéxico, el político del Partido de la Revolución Democrática (PRD) reconoce que una de las dificultades a las que se enfrentará es la situación financiera del estado, pues toma la administración con una deuda que ronda los 35,000 millones de pesos.

De esta cantidad, 17,500 millones son deuda a largo plazo, 14,000 millones son deuda contingente y otros 4,000 millones representan el déficit que se tiene en la nómina de los maestros. No obstante, considera que la cantidad aún es manejable.

"Se han ido rezagando pagos como el ISSSTE, al IMSS, pensiones y proveedores que rondan los 14,000 millones, y tenemos un déficit que venimos arrastrando por la nómina de los maestros que es de 4,000 millones. (La deuda) sí es un problema, pero tampoco somos de los estados más endeudados, nosotros tenemos un presupuesto de 60,000 millones de pesos, así que no me alegra, pero creo todavía es manejable", señala.

Debido a ello, asegura que arrancará su gobierno con un programa de austeridad para reducir sueldos y gastos de operación como telefonía celular.

"Voy a disminuir el salario del gobernador en un 25% y proporcionalmente también se bajarán los del primer nivel. Vamos a disminuir todos los gastos innecesarios", detalla, y explica que el sueldo actual del gobernador es de unos 115,000 pesos.

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Además, explica que iniciará el proyecto de una ciudad administrativa que concentre todas la oficinas del gobierno estatal, a fin de ahorrar recursos en vez de rentar casas y edificios, algo que se hace actualmente y que, en algunos casos, incluso representa negocios para los propios funcionarios.

¿Nuevo procurador?

El político toma las riendas del estado después de que en los últimos tres años ha sido gobernado por tres personas: los priistas Fausto Vallejo y Jesús Reyna —este último  en la cárcel acusado de proteger al cártel de Los Caballeros Templarios — y el académico Salvador Jara, quien le entrega el gobierno.

Aureoles deberá enfrentar lo que él mismo ha reconocido como focos rojos en materia de seguridad, que deben ser atendidos inmediatamente. Se trata de regiones —principalmente en la llamada Tierra Caliente— donde sigue habiendo violencia y enfrentamientos entre miembros del crimen organizado y grupos de autodefensa.

A pregunta de quién será el nuevo procurador, Aureoles señala que será hasta que nombre a su gabinete que tomará la decisión, pero alaba el trabajo de  Martín Godoy Castro, que en agosto fue ratificado  en el cargo.

"Alfredo Castillo (excomisionado para Michoacán), con todo lo que le cargan de críticas y demás, a mi juicio hizo un buen trabajo, sobre todo, los primeros seis meses. Que ellos se hayan enfrentado y desarticulado, una banda que ni el expresidente Felipe Calderón pudo con todo y Ejército, tiene su valor y, en buena medida, quien hizo esa chamba es el procurador que acaba de ser designado".

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No "gerentes" en PRD

Antes de asumir la gubernatura, Aureoles se da tiempo para hablar de la situación que vive su partido, luego de que los actuales dirigentes nacionales decidieron ­—después del descalabro electoral del 7 de junio— poner a disposición sus cargos. 

El exdiputado federal considera que la actitud que asumió la dirigencia y los órganos del partido en los últimos meses y años es la correcta. Incluso, critica que se haya apoyado el Pacto por México y ahora se arrepientan de haberlo hecho y quieran regresar a posiciones radicales.

"Yo no creo en el radicalismo ni en la confrontación permanente, creo en el diálogo y la construcción de acuerdos y soluciones. Debemos ser una oposición firme, defender las banderas ciudadanas, pero junto con ello construir soluciones", señala.

—Hay quienes dicen que su candidatura salió justo del pacto.

—Yo llevo 25 años construyendo este proyecto, este es mi tercer intento por ser gobernador, así que no hay tal. Sí se abrieron canales de diálogo y si hay diálogo se pueden establecer reglas que nos ayuden a todos.

—¿Cuál es el perfil que debe tener el nuevo dirigente de su partido?

—Voy a respetar lo que decidan los órganos de gobierno del partido, pero no me gusta mucho la idea que traen algunos grupos y dirigentes de buscar un externo para que venga a dirigir al partido, eso es buscar un gerente. Para dirigir a un partido hay que conocerlo, hay que sentirlo, hay que quererlo y hay que apasionarte por lo que es.

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Agenda 2018

Aunque dice que para 2018 todavía falta mucho porque estamos a la mitad del sexenio, Aureoles señala que será un momento importante para replantear muchas cosas que no le han salido bien al país y asegura que en su agenda personal no está ese año.

"Yo he decidido dedicarme al tema de Michoacán y no tengo en mi agenda el tema del 2018, ese asunto lo resolverá el partido donde milito, y donde necesitamos construir una alternativa atractiva, viable y con posibilidades de estar en la disputa y la competencia real, porque si no se logra, se llegará al 2018 de manera testimonial".

Debido a ello, el nuevo gobernador hace votos para que las fuerzas de izquierda logren ponerse de acuerdo para convertirse en una alternativa unificada.

"Si los proyectos de izquierda van juntos, la posibilidad es muy alta (...) así que ojalá haya sensatez, madurez, altura de miras y menos mezquindad, mesianismo y más apertura para incluir a todos. Yo veo muy difícil que solo Morena y Andrés Manuel López Obrador tengan un resultado aceptable si no vamos juntos, si no hay unidad", sostiene.

Y al hablar de los candidatos independientes, el político señala que pasará tiempo para que estén consolidados como una real opción ciudadana.

"A las euforias independentistas yo no le veo mucha solidez, (la opción ciudadana) es algo que requiere la sociedad, es necesaria la apertura y la inclusión, pero va a pasar tiempo para que se consolide la alternativa realmente independiente, porque a los independientes (de ahora) yo no les veo mucho, en términos de las fuerzas políticas y de los grupos de poder", concluye el político.

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