El turismo favorece la preservación de los ecosistemas
La necesidad de lograr un turismo sustentable actualmente obliga a cada una de las partes a conocer en mayor medida la diversidad que caracteriza a cada país a fin de establecer un mecanismo que genere el equilibrio del ecosistema sin que represente un riesgo para esa industria.
La riqueza de un ecosistema es fundamental para continuar impulsando el turismo en esas áreas, sin embargo, la falta de medidas responsables que abonen en la preservación de áreas naturales se ha vuelto uno de los principales temas a atender por dentro de la décimo tercera conferencia de las partes del Convenio de Diversidad Biológica COP13, que se lleva a cabo del 2 al 17 de diciembre en Cancún, Quintana Roo.
Dentro de la Convención, una de las soluciones expuestas por expertos y ambientalistas, es establecer una organización y reglamentos más estrictos sobre la convivencia y acceso por parte de los turistas hacia los hábitats, es decir, promover un turismo sustentable que no represente un riesgo en la preservación de la diversidad biológica.
Braulio Ferreira de Souza, secretario ejecutivo de la Convención de la Diversidad Biológica indicó que la discusión de ese tema como un problema central llega en el mejor momento, desde su perspectiva, la diversidad a nivel global se ha deteriorado más en los últimos 50 años que en toda la historia.
Con ello, el turismo para que sea sustentable debe comenzar a limitar el acceso de las personas a ecosistemas con un grado importante de biodiversidad e, incluso, elevar los costos por visitar esas áreas con el objetivo de tener un mejor control y una derrama económica excedente para preservar el ecosistema.
México tiene grandes ejemplos de éxito en cuanto a turismo sustentable. Por ejemplo, la reapertura de las Islas Marietas muestra que se puede disfrutar de la amplia diversidad sin afectar su desarrollo. Bajo las nuevas condiciones sólo ingresan 100 personas máximo al día a este paraíso en Nayarit y respetando el entorno para no afectar la evolución de los arrecifes.
Particularmente en Quintana Roo, el estado asumió el compromiso para promover un turismo ecológico centrado en la protección del medio ambiente en áreas claves como la reserva de la biofesra Sian Ka´an, para fijar un orden territorial, económico y especialmente promover una infraestructura en armonía con la diversidad y el turismo en ese lugar.
La reserva de Sian Ka´an está reconocida por la UNESCO como patrimonio mundial y que recientemente forma parte del área natural protegida del Mar Caribe, compuesta por 5 millones 750 mil hectáreas, detonar ordenamiento territorial.
El sur del país es una región particularmente con una riqueza en diversidad. Por ejemplo, el complejo Mayakoba o Xcaret, áreas que han sabido adoptar un modelo sustentable a la industria del turismo. Ambas zonas plantean una conexión entre los turistas sin alterar el equilibrio de la flora y fauna característica en esas regiones.
En los últimos años el turismo en México pretende encaminarse en un modelo que permita una derrama económica con la particularidad de permitir el desarrollo de la diversidad, la preservación de los ecosistemas, el cuidado de la flora y fauna de esas regiones.
Actualmente la mayor parte de los estados desde el norte al sur del país pretenden adoptar un turismo más amigable con el entorno. En Yucatán, con su propuesta de aldea Maya; Sinaloa con El Quelite, un lugar donde los visitantes pueden apreciar las actividades cotidianas y tradicionales como el juego de pelota en México, son tan solo algunos ejemplos de este nueva forma de hacer turismo.
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