Republicanos avanzan en recorte a Obama
Los republicanos ganaron el miércoles pasado uno de los primeros asaltos en la pelea con la que buscan reducir el Gobierno, al hacer que avanzara un recorte de 4,000 millones de dólares en el gasto, a través del Congreso, una iniciativa que evitó por dos semanas la posibilidad de que se paralizaran por falta de fondos las operaciones gubernamentales.
El presidente Barack Obama, quien ha sido hasta ahora un espectador de la disputa, envió al vicepresidente para abrir negociaciones sobre una iniciativa de egresos más amplia y de largo plazo, así como para encontrar "puntos en común" con los líderes republicanos, determinados a recortar decenas de millones de dólares más, lo que frustraría buena parte de la agenda del mandatario.
Obama promulgó con su firma la medida de financiación que recorta los 4,000 millones de dólares pero que mantiene en operación al Gobierno estadounidense.
La promulgación llegó horas después de que el Senado, controlado por los demócratas, aprobó la propuesta y la envió a la Casa Blanca, dando el visto bueno a una medida redactada por los republicanos, la cual fue aceptada el martes pasado por la Cámara de Representantes. La ley de asignaciones impide temporalmente una parálisis gubernamental que parecía inminente el viernes.
Obama pidió a líderes legislativos que se reúnan con altos funcionarios del Poder Ejecutivo, incluido el vicepresidente Joe Biden, para negociar una medida a largo plazo a fin de financiar el Gobierno hasta el 30 de septiembre.
"Podemos hallar puntos en común", dijo Obama. "Este acuerdo debe ser bipartidista, debe estar libre de cualquier agenda política o social, y debe ser forjado sin demora".
El Senado aprobó la iniciativa por 91 votos a favor y nueve en contra. Obama tenía hasta el viernes para promulgar el proyecto de ley y mantener abiertas las oficinas federales. La cámara baja aprobó la medida el martes pasado.
La medida le permitió ganar tiempo a la Casa Blanca y a los legisladores para que negocien una iniciativa complementaria que fije los niveles del gasto hasta el 30 de septiembre, cuando termina el año fiscal.
"Es necesario enfocarnos en que ambas partes encuentren un punto de acuerdo con el fin de llegar a una solución de largo plazo que elimine el tipo de incertidumbre que puede afectar a la economía y a la creación de empleos", dijo el secretario de prensa de la Casa Blanca, Jay Carney, luego de la votación en la Cámara baja.
A finales del año pasado, el Partido Republicano logró el control de la Cámara de Representantes y ganó más escaños en el Senado con el apoyo de los activos del movimiento político "Tea Party". Desde entonces, los republicanos han intensificado una ofensiva para disminuir el gasto federal y aplicar otras medidas a fin de reducir el tamaño del gobierno federal.
En la Cámara baja, los demócratas fustigaron a los republicanos antes de la votación, pero una gran parte de las críticas estuvieron dirigidas contra un anterior paquete con reducciones en el gasto por 61,000 millones de dólares que fue aprobado con el voto de la mayoría republicana.
Se pretende que el ahorro de 4,000 millones de dólares se logre a través de algunos de los recortes de gastos más fáciles que el Congreso debe hacer, impactando cuentas que Obama de antemano había propuesto eliminar.
