Contracción de EU en primer trimestre es menor a la prevista
La economía de Estados Unidos se contrajo levemente en el primer trimestre de 2015 debido a un mal clima, un dólar fuerte, recortes de gastos en el sector energético y huelgas en los puertos de la costa occidental del país.
No obstante, hay señales de que el crecimiento se aceleró en el segundo trimestre al superarse factores como la disputa laboral en los puertos y quedar atrás un crudo invierno. Los minoristas reportaron fuertes ventas en mayo y los empleadores aumentaron la contratación de trabajadores. El sector vivienda también se ha fortalecido.
El Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos cayó a una tasa anual de 0.2% en el primer trimestre del año en lugar de sufrir una contracción del 0.7% reportada el mes pasado, informó este miércoles el Departamento de Comercio.
Un ritmo más fuerte a lo previamente estimado en el gasto del consumidor fue lo que más pesó en la revisión al alza.
El gasto del consumidor, responsable de más de dos tercios de la actividad económica estadounidense, fue revisado al alza con un ritmo de crecimiento del 2.1%, frente al 1.8% reportado el mes pasado.
Ante el crecimiento de los ahorros personales a un robusto ritmo de 720,200 millones de dólares, el gasto del consumidor podría acelerarse en el segundo trimestre.
El crecimiento de las exportaciones fue revisado al alza, pero ese avance fue contrarrestado por una revisión para reflejar aumentos en las importaciones, generando un amplio déficit que restó casi dos puntos porcentuales del PIB.
La revisión del PIB estuvo en línea con la proyección de analistas. En el cuarto trimestre la economía se expandió a una tasa del 2.2%.
No obstante, lo más probable es que la caída de la producción en el primer trimestre no sea un reflejo cierto de la salud de la economía.
Economistas, entre ellos los del Banco de la Reserva Federal en San Francisco, dicen que un problema con el modelo usado por el Gobierno para proteger los datos de las fluctuaciones estacionales también contribuyó a rebajar la cifra del PIB.
El argumento que esgrimen es que el autodenominado ajuste estacional no está prescindiendo del todo de los patrones temporales, afectando de forma "residual" a las cifras.
El Gobierno dijo el mes pasado que está al tanto del problema potencial y está trabajando para subsanarlo cuando publique sus revisiones anuales del PIB en julio.
Si se mide con la parte de los ingresos, la economía se expandió a un ritmo del 1.9% en el primer trimestre, frente al 1.4% previamente reportado.
Una medida de crecimiento de la demanda a nivel doméstico fue revisada al alza en cuatro décimas de punto porcentual, hasta el 1.2%.
Economistas creen que las nevadas inusualmente fuertes de febrero restaron al menos un punto porcentual al crecimiento.
Las estimaciones sobre gasto en equipo registraron pocos cambios. El gasto de las empresas ha estado afectado por la fortaleza del dólar y los bajos precios de la energía.
Las compañías acumularon más inventarios de lo que previamente se había calculado en el primer trimestre, lo que podría significar que tendrían pocos incentivos para seguir aumentando las existencias de bienes en el trimestre actual. El valor del inventario acumulado en el primer trimestre fue revisado a un alza de 99,500 millones de dólares desde 95,000 millones de dólares en la lectura reportada el mes pasado.
De esa manera, los inventarios contribuyeron con 0.45 puntos porcentuales al PIB en lugar de los 0.33 puntos porcentuales reportados previamente. Los inventarios podrían ser un lastre para el PIB en el segundo trimestre.
