Hacienda prevé mayor crecimiento económico y superávit fiscal para 2018
El Gobierno Mexicano ve un mejor panorama económico en 2018 respecto a este año, con un mayor crecimiento del Producto Interno Bruto, un peso más fuerte y la inflación hacia la baja.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) prevé un crecimiento de entre 2.0% y 3.0% para el siguiente año de acuerdo a los Criterios Generales de Política Económica presentados la mañana de este viernes al Congreso de la Unión .
Las perspectivas de Hacienda se presentan más optimistas ante el complejo entorno político y económico mundial que se espera para 2018 y en vista de las elecciones presidenciales y el cierre de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
La inflación para el siguiente año se espera que vuelva a niveles de 3%, en sintonía con la meta de Banco de México, luego de que este año el aumento de los precios se prevé cierre en casi 5.8% y alcanzó niveles no vistos en 16 años.
Para el tipo de cambio el presupuesto se ha basado en una recuperación del peso a niveles de 18.1 pesos por dólar en promedio, luego de que este año la divisa estadounidense cerraría en 18.70 en promedio.
José Antonio Meade, titular de la dependencia, refirió que se espera un superávit primario histórico en las finanzas públicas de 1.5% del PIB, incluyendo el remanente del Banco de México, y de 0.4% sin considerarlo, después de que en años anteriores la deuda pública representó una fuerte presión para las finanzas.
Asimismo, espera un precio de 46 dólares por barril para la mezcla mexicana y una producción petrolera de 1.983 millones de barriles diarios (contra 2.01 mdbd promedio a julio de 2017), en tanto que la plataforma de exportación petrolera se estima en 880,000 barriles.
"Estos implican ya una estabilización por los efectos positivos, de la reforma energética y correcta implementación del plan de negocios de Pemex", dijo Meade Kuribreña.
José Antonio Meade consideró como realistas las perspectivas de estos indicadores, lo que permitirá “ejecutar una política fiscal prudente” pues el superávit primario que se espera, sería el primero desde 2008.
“Los recursos de dicho remanente, servirán para mejorar las metas de finanzas públicas para este año y no para financiar gasto adicional”, dijo al funcionario en la Cámara de Diputados.
Durante este año, la dependencia a cargo de Meade, ha concentrado esfuerzos en generar superávit en la cuenta pública, tras el objetivo de que el país mantenga la calificación crediticia de BBB+, para garantizar el acceso a créditos y fondeo a través de bonos.
A finales del año pasado, esta calificación se vio en riesgo, cuando Fitch, Standard & Poors y Moody´s pusieron en negativa la perspectiva, desde estable y en julio pasado, las dos primeras la revisaron a estable.