Influenza golpea a Ángeles y Camino Real
“Me duele, y me reta como parte de una generación de empresarios jóvenes vivir simultáneamente la mayor crisis desde el 29 y una crisis epidemiológica insólita. Pero hay que demostrar de qué estamos hechos, lo vamos a superar”, afirma Olegario Vázquez Aldir, presidente de Grupo Empresarial Ángeles (GEA) y lugar 23 del ranking de Expansión de los empresarios más importantes de México.
Los 20 centros de salud de Grupo Ángeles atendieron en abril a 300 pacientes con un cuadro probable de gripe provocada por el virus N1H1. Fallecieron tres personas que llegaron antes de la alerta nacional, en estado ya muy crítico. “Después del 23 de abril en que la gente supo que debía ir al doctor a los primeros síntomas, no hemos tenido ninguna complicación”.
El negocio hospitalario, a diferencia del de los proveedores del sector salud, no verá grandes ganancias con esta crisis sanitaria. Los pacientes con dolencias postergables se alejaron de los hospitales, por más que se les reiterara que el área de infecciones y los quirófanos están en alas separadas. Las consultas de problemas respiratorios se disparaban mientras caía el flujo habitual de cirugías o análisis de laboratorio. “A partir de la segunda semana de crisis, calculo una caída de ingresos de 5%, hasta que se normalice la situación”, dice.
Vázquez Aldir propone crear laboratorios de procesamiento de pruebas para que no haya que enviarlas a Estados Unidos, un cambio cultural que modificará la práctica de la automedicación y que daría pie a una consolidación comercial de diversos negocios, empezando por las cadenas farmacéuticas.
El turismo fue el sector más golpeado en GEA por la crisis económica, de seguridad y de salud en 2009. El grupo hotelero Camino Real, concentrado en turismo de negocios en ciudades, sufrió una caída en su ocupación a mínimos históricos, “por debajo de 20% para toda la industria en el DF, por debajo de su punto de equilibrio”. Además, sus ingresos por alimentos y bebidas se redujeron por el cierre de los restaurantes, donde Vázquez Aldir estima que el grupo perderá 35% de los ingresos, alrededor de 600 millones de pesos. “Pero la salud es primero, y había que tomar las medidas que se tomaron”.
El empresario confía en que el fin de la epidemia traerá un rebote importante: “La gente que tenía un congreso lo tiene que hacer, quien se iba a casar, celebrará su boda, y quien tenga que presentar un nuevo producto lo presentará”. Quizá por eso Vázquez Aldir no modificó sus planes de crecimiento para 2009: abrirá tres hospitales (en Lindavista, en el DF, en Jalapa y en Tampico).
Dentro de su programa para enfrentar la crisis económica incrementará el número de hoteles operados por Camino Real, hasta el año pasado su plan de crecimiento se basaba en hoteles propios, mediante una estrategia conjunta con el grupo financiero de GEA, Multiva. El plan lo presentó en el poco concurrido Tianguis Turístico de Acapulco celebrado en abril. “Proponemos financiar a los hoteleros que requieran recursos para la reconstrucción de sus establecimientos. Multiva financia y Camino Real opera. Así se desatora una parte de infraestructura turística detenida”.
Para la gestión de la crisis basó su método en la misión del grupo: crear valor. El periódico Excélsior, la cadena Imagen de radiodifusoras y la Cadena 3 de televisión trabajaron a pleno ritmo como uno de los sectores que se mantuvo encendido durante el cese nacional de labores.
Los medios informaron, los hospitales atendieron pacientes, y en los hoteles y el grupo financiero se repartieron tapabocas y protegieron a los empleados más vulnerables. “Estoy muy orgulloso del grado de compromiso de todos”.