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Lagerfeld: un hombre, dos personalidades

Dentro del diseñador Karl Lagerfeld vive su solitaria antítesis, confesó a la revista Life & Style; el también fotógrafo ama estar solo y disfruta plasmar para la eternidad la belleza del mundo.
dom 27 febrero 2011 06:00 AM
Lagerfeld confiesa que toda imagen es historia, al menos en potencia, y el ahora sólo remite al momento en que fue tomada (Foto: AP)
lagerfeld (Foto: AP)

Se llama Karl Otto Lagerfeld, y sus dos nombres son tan distintos como su personalidad. El diseñador y fotógrafo ícono de Chanel no sólo es un individuo tan cambiante como la moda que crea, sino que también es una persona que plasma a través de sus fotografías instantes que durarán por siempre.

La moda para Karl es un autentico indicador de nuestro tiempo y un modo de ser.

"El diseñador tiene que ser consciente e inconsciente a un tiempo; la razón, en un momento inadecuado, puede terminar con la inspiración y el talento", afirma Lagerfeld en una entrevista publicada en la edición de febrero de la revista Life & Style , en la cual se hace referencia, mediante un juego literario, a las dos personalidades que confiesa que tiene.

Su "lado Otto" es un individuo poco sociable, que encuentra en la fotografía una forma de escape.

"No puedo imaginarme la vida sin la visión de un fotógrafo; veo el mundo a través del lente", confiesa el modisto de 77 años.

Detrás del  conocido hombre de ceñido traje negro, coleta blanca y guantes, se esconde un individuo que acepta que la belleza es cambiante al igual que la moda, pero ésta es capaz de trascender en el tiempo gracias a la fotografía.

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Lee aquí el ARTÍCULO COMPLETO "El otro yo de Karl Lagerfeld" (ACCESO LIBRE)

Desde que Lagerfeld emigró a Paris a los quince años se dedico por completo al diseño, se rodeo de grandes personalidades y se catapulto como la imagen renovadora de Chanel.

Pero oculto tras bambalinas habitaba todavía aquel niño autodidacta que prefería pasar los días solo leyendo que estando con otros niños.

"Odiaba la compañía de otros niños, quería ser una persona mayor, quería ser tomado en serio" , afirma Lagerfeld.

Una vez que descubrió su pasión por la foto salió a la luz sus dos formas de ser: uno que ésta en el instante (la moda) y otro que vive en la eternidad (la foto). En Lagerfeld convive un individuo que ama el instante, por el cambio, pero por otro, el amor por lo eterno, por la belleza.

Los dos genios dentro de él han dado un vuelco al mundo de la creación y lo han consagrado como un individuo que muere a cada instante, en cada imagen, en busca de la eternidad. 

Lee aquí el ARTÍCULO COMPLETO "El otro yo de Karl Lagerfeld" (ACCESO LIBRE)

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