Al infinito y más allá...
Un chip transformó la vida de Francisco Martínez de Velasco. A cuatro años de iniciar su ciber empresa Neology, está por concretar tres grandes logros: entrar al Nasdaq, lograr el punto de equilibrio durante el próximo trimestre y concretar el negocio más jugoso de su carrera: exportan microprocesadores de radiofrecuencia con aplicación en sistemas de seguridad hacia Paquistán. Esta combinación llevará a la empresa a un crecimiento de 250% al final de 2005.
- Hace unas semanas Martínez recibió el premio wibta, que otorgan la Wharton Business School e Infosys. Pero él prefiere la mesura: “Estamos muy lejos de donde queremos llegar, el mercado es increíble y las aplicaciones infinitas, tenemos que enfocarnos bien y poner los pies en la tierra para no tropezarnos”.
- El año pasado, Neology facturó $133 mdp. Este año “vendimos en el primer trimestre esa misma cantidad”, dice. Con una planta nueva en San Diego, Martínez considera que Neology incrementará su producción de 20 a 40 millones de microprocesadores anuales.
- Mientras tanto sólo espera que “se den las condiciones en el mercado” para ingresar al Nasdaq con 23% de su capital. El financiamiento se utilizará en tres objetivos: desarrollo tecnológico, protección de propiedad intelectual y expandir de su presencia en el mundo.
- La sobrerregulación de los mercados de valores estadounidenses, dice, no es un problema, pues “aunque la regulación tiene un costo, los beneficios de capitalizarnos son mayores”.
- Por ahora Martínez no le teme al futuro: “la radiofrecuencia es uno de los mercados más calientes y sus posibilidades son infinitas”, concluye.