FBI advierte un aumento de espionaje económico proveniente de China
El Buró Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés) ha visto un aumento en los casos de espionaje económico de las compañías estadounidenses, con una amplia mayoría de los perpetradores que desde China tienen lazos con su gobierno, informaron autoridades el jueves.
En un informe presentado en las oficinas centrales de la agencia estadounidense en Washington, el jefe de la división de contrainteligencia del FBI, Randall Coleman, dijo que la dependencia ha visto un incremento del 53% en los casos de espionaje económico, o el robo de secretos sobre comercio exterior, generando pérdidas de miles de millones de dólares en los últimos 12 meses.
El funcionario citó ejemplos de grandes corporaciones que han sido dañadas por esta práctica en el pasado, como DuPont, Lockheed Martin y Valspar, que desde entonces han trabajado con el FBI para fortalecer su propiedad intelectual.
Para enfatizar esta amenaza creciente a la economía de Estados Unidos, el FBI lanzó una campaña a nivel nacional que pretende advertir a los líderes de la industria sobre los peligros que enfrentan de espías extranjeros. Pero el FBI no solamente considera esto una amenaza a la economía estadounidense y su prosperidad, sino también a la seguridad física.
“La seguridad económica es seguridad nacional”, dijo Bill Evanina, jefe del Centro Nacional de Seguridad y Contrainteligencia y uno de los agentes que lidera el contraataque a esta amenaza para las corporaciones. Muchas de las herramientas que usa son las que sirven para identificar a los terroristas, comentó.
En una encuesta llevada a cabo por el FBI, la mitad de las 165 compañías privadas que participaron en el estudio aseguraron que fueron víctimas de espionaje económico o robo de secretos de comercio, y 95% de estos intentos se originaron de individuos asociados con el gobierno de China.
Una de las maneras más amenazantes de obtener secretos sensibles de la industria es a través del uso de “amenazas desde adentro” o empleados que están familiarizados con el trabajo interno de una tecnología particular, siendo reclutados por agentes extranjeros a cambio de grandes cantidades de dinero.
El FBI continúa con sus intentos de detectar estas amenazas, inspeccionando correos electrónicos o vínculos que parecen legítimos pero de hecho son mensajes con virus que pretenden engañar a los receptores, ofreciéndoles información personal. Las redes sociales y sitios como LinkedIn son utilizados en el espionaje económico, donde los reclutadores potenciales pueden ser encontrados y contactados en base a su conocimiento relevante y su experiencia laboral.
También se han presentado casos recientes de secretos de comercio que han sido robados. En un caso, el FBI aseguró que ciudadanos chinos fueron sorprendidos escarbando en campos de maíz en Iowa en busca de semillas que fueron desarrolladas por compañías estadounidenses para actuar como pesticidas y anti-sequía. Si bien el robo de semillas de maíz pareciera no tan grave, en realidad la compañía que las desarrolló gastó decenas de millones de dólares en investigación para perfeccionar su tecnología.
El objetivo del espionaje económico es ahorrar a una compañía el capital que le tomaría invertir en investigación y desarrollo, copiando el proceso de métodos ya probados de producción.
Casos de robo incluyen avances tecnológicos en pintura, semillas y granos, así como los blancos tradicionales que son las comunicaciones militares.
Si bien muchas de las compañías no se percatan de que son blancos del espionaje económico, el FBI constantemente busca “referencias” o reportes de conductas consistentes de esta amenaza.
