ChemChina hace oferta acordada de 43,000 mdd por Syngenta
El gigante estatal químico chino ChemChina ofreció la suma récord de 43,000 millones de dólares por la multinacional suiza especializada en productos agroquímicos Syngenta, cuyo consejo de administración aprobó de forma "unánime" la propuesta.
La operación representaría la adquisición más importante de una empresa china en el extranjero, indicó este miércoles un comunicado divulgado por ambos grupos.
En concreto, la China National Chemical Corp (ChemChina) propone 465 dólares por acción nominal, a los que se añadirá un dividendo especial de cinco francos suizos por título (casi 5 dólares).
"La transacción propuesta respeta los intereses de todas las partes", destacó en el comunicado la firma helvética, con sede en la ciudad de Basilea.
Una declaración que confirmaba la Bolsa de Zúrich, donde la acción de Syngenta subía más de 5% a las 08:00 hora del centro de México.
La fusión, mediante una Oferta Pública de Adquisición (OPA), se lanzará formalmente durante las dos próximas semanas en Suiza y en Estados Unidos y debería concluir antes de fin de año.
El año pasado, Syngenta había rechazado una OPA de 47,000 millones de dólares de su rival estadounidense Monsanto, que ahora podría estudiar una contraofensiva.
ChemChina, un gigantesco conglomerado cuya gestión depende directamente del gobierno central chino, lleva a cabo una política de fuerte expansión internacional.
En 2015, se hizo con el control del fabricante de neumáticos italiano Pirelli, en una operación valorada en 7,400 millones de euros, y recientemente anunció la adquisición de Kraussmaffei, un emblemático fabricante alemán de máquinas-herramientas para la industria plástica, por 925 millones de euros (1,001 millones de dólares).
En su búsqueda de diversificación, ChemChina tomó en enero de este año 12% de participación en el capital de la firma de corretaje suiza Mercuria.
Potencial en la mejora de granos
La adquisición de Syngenta convertiría a ChemChina en uno de los mayores fabricantes de pesticidas y de agroquímicos del mundo, reduciendo al mismo tiempo su dependencia de las actividades petroquímicas.
"Con esta oferta, ChemChina reconoce el potencial de Syngenta", subrayó el presidente de Syngenta, Michel Demaré, quien espera que gracias al acuerdo el grupo suizo "aumente su presencia en los mercados emergentes, y particularmente en China".
ChemChina podrá ingresar por su lado en el sector de la elaboración y la comercialización de granos.
Las mejoras de granos y las tecnologías agrícolas son esenciales para las autoridades chinas, que enfrentan el desafío de alimentar a una población de 1,300 millones de habitantes en un país donde las tierras cultivables se reducen de forma inexorable.
Pero la alianza tiene ambiciones mayores. "Nuestra visión no se limita a intereses mutuos, sino que buscará responder a los intereses de los agricultores y los consumidores de todo el mundo", declaró el presidente de ChemChina, Ren Jianxin, citado en el comunicado.
Cuestiones reglamentarias
La oferta de ChemChina tiene una financiación sólida, según Syngenta, y demuestra una "auténtica voluntad" de conseguir las autorizaciones reglamentarias necesarias.
Una referencia a las autorizaciones que la fusión deberá obtener para concretarse, sobre todo en Estados Unidos, uno de los principales mercados de Syngenta.
En 2005, el gigante petrolero chino CNOOC tuvo que renunciar a un proyecto de adquisición del grupo estadounidense Unocal por 18,500 millones de dólares, debido a la fuerte oposición política que el proyecto generaba en Washington.
La propuesta de ChemChina podría ser bien acogida por los accionistas, pues "es totalmente en dinero efectivo", pero podría plantear resistencias políticas, advirtió un analista del banco alemán Baader.
El acuerdo prevé la permanencia en funciones del equipo directivo actual de Syngenta y mantener su sede en Basilea, así como la creación de consejo de diez administradores presidido por Ren Jianzin, precisaron los comunicados de ambas compañías.
Se trataría de la mayor adquisición china de una empresa extranjera, muy por delante de la compra en 2013, por 15,100 millones de dólares, del grupo canadiense Nexen por la petrolera CNOOC.