Palestinos rechazan plan de paz
Líderes palestinos rechazaron el sábado una propuesta de Estados Unidos que busca promover la paz a través de una agenda de medidas de seguridad recíproca con Israel.
El gobierno israelí, sumergido en una grave crisis interna, ya se había mostrado frío ante el plan de Washington de fijar una "línea de tiempo" para medidas que incluyen el control de los ataques con cohetes de las fuerzas palestinas y una flexibilización de las restricciones a los viajes de Israel.
En una atmósfera de profunda desconfianza mutua y de debilidad en ambos gobiernos, el futuro de la propuesta parece incierto.
Líderes del movimiento islámico palestino gobernante Hamas descartaron la posibilidad de mantener más discusiones.
"El plan estadounidense es rechazado y vamos a hacer todo lo posible para que fracase", dijo el portavoz de Hamas Fawzi Baroum.
Un colaborador cercano a Mahmoud Abbas, del partido Fatah, también rechazó el plan borrador presentado al presidente y al primer ministro israelí, Ehud Olmert, la semana pasada.
El líder de Hamas, Khaled Meshaal, mostró el viernes el rechazo de la organización a la propuesta.
"Declaro oficialmente el rechazo de Hamas a este documento y a cualquier proyecto estadounidense, europeo, israelí, e incluso árabe que disminuya así la causa palestina (...) Es una fórmula para levantar los bloqueos de ruta a cambio de abandonar la resistencia", dijo Meshaal en Damasco.
El Departamento de Estado estadounidense dijo que sólo propone "medidas informales" y "flexibles" sin "límites de tiempo fijo".
Un sitio en internet pro Hamas citó a Meshaal diciendo: "Debemos mantener nuestros dedos en el gatillo y prepararnos para la batalla".
Uno de los seis misiles disparados el viernes desde la Franja de Gaza provocó daños a una casa israelí.
La Jihad Islámica, que no se comprometió al cese de fuego iniciado por Hamas hace seis meses, se adjudicó la responsabilidad del ataque.
Sanciones
El colaborador del presidente Abbas, Yasser Abed Rabbo, se quejó de que el plan no hace a Israel responsable de atender las demandas palestinas para poner fin a las sanciones económicas y reavivar las conversaciones por la fundación de un estado.
"No se puede implementar este plan porque Israel no está dispuesto a cambiar su posición y poner fin al sitio", dijo Rabbo.
"Este plan no mencionó las cuestiones políticas y no lo consideramos una alternativa a las negociaciones políticas para terminar con la ocupación".
La rivalidad entre Fatah y Hamas provocó un baño de sangre desde la victoria del grupo islámico en elección parlamentaria del año pasado.
Los palestinos quieren que se levanten las sanciones impuestas por la negativa de Hamas a renunciar a la violencia que ha mutilado la economía.
Por su parte, Israel dice que el plan de Estados Unidos no es lo suficientemente amplio como para garantizar un mejoramiento de su seguridad a cambio de la flexibilización del control al tránsito de los palestinos y sus bienes.
Washington busca implementar medidas para bajar las tensiones, mientras intenta promover relaciones con sus aliados árabes, preocupados por el caos provocado en Irak desde que comenzó la invasión estadounidense.
Los dos bandos del conflicto enfrentan grandes dificultades.
Hamas sospecha de los esfuerzos estadounidenses para reforzar las fuerzas de seguridad administradas por Abbas, que según la propuesta deberían controlar el contrabando de armas y el lanzamiento de misiles en Gaza desde el mes próximo.
El presidente debe reunirse el domingo con el primer ministro Ismail Haniyeh, de Hamas, para conversar sobre la seguridad.
En Israel, Olmert viene esquivando los pedidos de renuncia desde que una investigación oficial publicada el lunes criticó su manejo de la guerra en el Líbano el año pasado. Muchos en Israel creen que su autoridad ya ha sido definitivamente socavada.