Brasil trabaja ante demanda de energía
Brasil anunció el lunes proyectos para la construcción de tres hidroeléctricas con Argentina y dos con Bolivia, como parte de los planes para enfrentar una creciente demanda de energía en la región.
El plan surge en momentos en que los tres países buscan resolver un esperado aumento de la demanda, durante el invierno austral, del gas natural que exporta Bolivia a sus vecinos y luego de que Brasil se negara a ceder a Argentina parte del que tiene contratado.
El ministro brasileño de Minas y Energía, Edison Lobao, dijo luego de reunirse con el presidente Luiz Inácio Lula da Silva que había acordado con el mandatario "comenzar a tomar las providencias ya este mes".
"Vamos a tener una reunión conjunta los tres ministros de Energía de los tres países", declaró a periodistas sin dar más detalles sobre dónde estarían ubicadas las plantas.
Las hidroeléctricas sumarían 10,000 megavatios y tendrían un costo estimado en unos 30,000 millones de reales (17,585 millones de dólares).
Lobao dijo que la ministra brasileña de Medio Ambiente, Marina Silva, participaría de las reuniones "para que la burocracia sea definitivamente vedada de esos entendimientos".
El ministro reiteró, en tanto, que Brasil se atendrá a su contrato con Bolivia, que prevé el suministro de hasta 30 millones de metros cúbicos de gas por día (mmcpd), sin ceder parte a Argentina, que importa 7,7 mmcpd y enfrenta dificultades en el abastecimiento.
"En cuanto al gas, no habrá modificación. En cuanto a la energía, vamos a ayudar a Argentina en los momentos más difíciles", afirmó.
La semana pasada, la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, le pidió a Lula durante un encuentro que Brasil le ceda a su país 1 mmcpd de gas boliviano.
Ambos mandatarios se reunieron también el sábado en Buenos Aires con su colega de Bolivia, Evo Morales, para buscar una solución a los problemas energéticos de la región y decidieron formar una comisión de trabajo tripartita.
La petrolera estatal de Brasil, Petrobras, ha anunciado inversiones en Bolivia para aumentar la producción de gas, pero en el corto plazo el país del altiplánico enfrenta problemas para cumplir la totalidad de sus contratos de suministro con sus vecinos.
