Vasconcelos y su combate al crimen
José Luis Santiago Vasconcelos, secretario técnico de la Comisión de la Reforma Penal, pertenecía a la Procuraduría General de la Repúblca (PGR) desde 1993.
La última labor de Vasconcelos en el gobierno federal fue la coordinación de las propuestas de para emprender cambios al sistema judicial del país.
Así se desprende del nombramiento que hizo el propio presidente Felipe Calderón al designarlo secretario técnico del Consejo para la Implementación de la Reforma Penal.
Con una experiencia formada en más de 20 años en el servicio público, Santiago Vasconcelos se convirtió en un experto en el combate al crimen organizado.
Polémico, el funcionario, estuvo en el ojo del huracán en temas como la infiltración del narcotráfico en el gobierno federal y el espionaje de políticos allegados a la oposición.
Este año todavía se desempeñó como Subprocurador Jurídico y de Asuntos Internacionales de la Procuraduría General de la República (PGR), puesto al que renunció a fines de julio.
Como tal, Santiago Vasconcelos encabezó las respuestas del gobierno a las solicitudes de extradición de algunos narcotraficantes.
Asimismo, se desempeñó por varios años como titular de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO). Algunos de los casos más sonados pasaron por sus manos, como el decomiso de más de 240 millones de dólares al empresario chino Zen-Li Yegon y los operativos contra cárteles de narcotraficantes, como el de los Beltrán Leyva y de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Santiago Vasconcelos recibió amenazas de esos grupos y fue, además, víctima de por lo menos un atentado.
En su momento, Santiago Vasconcelos declaró que: “Es parte de los riesgos que tenemos todos quienes estamos comprometidos en el área tanto de seguridad pública como de procuración de justicia, en este combate a la delincuencia organizada”.
La salida de Santiago Vasconcelos de la PGR fue vista inicialmente como una de las primeras acciones de su titular, Eduardo Medina Mora, para reestructurar tanto a la Procuraduría como a la SIEDO.
A las pocas semanas, explotó el caso de que algunos funcionarios de la subprocuraduría fueron detenidos por vender información de inteligencia a la organización de los Beltrán Leyva.
De hecho, se supo que ellos pertenecían a un grupo de élite que en 2002 conformó el propio Santiago Vasconcelos.
La Procuraduría señaló, sin embargo, que no había indicios que señalaran la participación de Vasconcelos en casos de corrupción. El propio funcionario salió a decir que en su tiempo se habían establecido controles de confianza a su personal.
A Vasconcelos se le han conferido, entre otros reconocimientos, la Condecoración de la Orden del Mérito Policial del Gobierno Español.
En círculos de seguridad pública, se sabía que aunque Vasconcelos tenía enemistades con el secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, era hombre de todas las confianzas de las agencias anticrimen de Estados Unidos.
Hace menos de un mes, Vasconcelos participó en una cátedra de la UNESCO en la Universidad Iberoamericana, el funcionario le dijo a estudiantes que él apoyaba la idea de generar normas y códigos de conducta de los comunicadores.
Sin embargo, dijo oponerse a la idea de reglamentar y acotar el trabajo de la prensa desde el gobierno.