"Mister President, let´s build a new era, yes we can", dijo en inglés el presidente mexicano, Felipe Calderón, a su homólogo estadounidense, Barack Obama, al darle la bienvenida este jueves a la capital mexicana.
Calderón pidió Obama unir esfuerzos para que "la frontera común sea un ejemplo de productividad y seguridad".
El mandatario afirmó que para que ambas economías puedan crecer y prosperar, México necesita de las inversiones de Estados Unidos, así como Estados Unidos necesita del empuje de la fuerza laboral mexicana.
Calderón reiteró la necesidad de impulsar en EU una reforma migratoria que regularice la situación de millones de mexicanos en la Unión Americana y permita el reencuentro de las familias divididas por la frontera.
El mandatario mexicano insistió en la necesidad de que los derechos humanos se respeten en ambos lados del Río Bravo.
"Debemos ser vecinos, amigos, socios y aliados", dijo Calderón al referirse a los lazos que unen a ambos países, y afirmó que los dos deben enfrentar juntos los problemas globales y regionales que aquejan a las economías de Norteamérica.
Calderón señaló como los principales desafíos la crisis económica, el terrorismo, el combate al crimen organizado y la sustentabilidad del medio ambiente.
Los retos que enfrentamos requieren sumas de esfuerzos entre los dos países, dijo Calderón, "lo que le sucede a nuestro vecino no debe sernos indiferente".
La visita de Obama es la primera a la capital del país de un presidente estadoundiense, desde que hace doce años vino el demócrata Bill Clinton. Obama partirá mañana viernes hacia Trinidad y Tobago para participar en la reunión de líderes latinoamericanos agrupados en la Organización de Estados Americanos (OEA).
"Tenemos la oportunidad de iniciar una nueva era de confianza y cooperación, una era donde forjemos juntos el desarrollo sustentable de nuestros pueblos", dijo Calderón a Obama.
El presidente mexicano afirmó que su gobierno está realizando "grandes esfuerzos" para poner punto final a la pobreza extrema y al atraso económico, "para que nuestros hijos no tengan que abandonar nuestra tierra por falta de oportunidades".
Sobre la lucha contra el narcotráfico, Calderón dijo que México está padeciendo los costos de haber emprendido un combate frontal contra los cárteles de la droga.
Pidió a Barack Obama que Estados Unidos también tenga una responsabilidad compartida en la guerra contra el crimen, que afecta a ambos lados de la frontera.
En su oportunidad Obama dijo que EU está comprometido a detener el flujo de dinero y armas que llegan a México. Elogió el trabajo que ha realizado el gobierno mexicano en su lucha contra el narco y prometió mayor cooperación para enfrentar juntos el problema.