Rechazan las cuentas públicas de Fox
El pleno de la Cámara de Diputados rechazó la aprobación del dictamen de la Cuenta Pública de 2002 y 2003, correspondiente al sexenio de Vicente Fox, en medio de un largo debate plagado de acusaciones, ataques y por momentos tensión.
En la sesión en San Lázaro, panistas, priistas y perredistas se enfrascaron en un diferendo verbal en la más alta tribuna de la nación, con asuntos como el llamado "toallagate", la "megabiblioteca", la remodelación del Rancho Fox y la llamada playa "Tamarindillo".
Los panistas respondieron aludiendo los 70 años de gobiernos priistas y los casos de opacidad y corrupción, así como los escándalos de corrupción de René Bejarano, el llamado "Señor de las ligas".
Por primera vez en la historia del país, se rechazaron avalar las Cuentas Públicas de un gobierno federal.
El dictamen de la Cuenta Pública 2002 fue rechazado por 174 votos en contra y una abstención, y la del 2003 también fue rechazada por 179 votos en contra y 165 a favor. Ambas cuentas fueron regresadas a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública.
El presidente de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación, Antonio Ortega Martínez, reconoció que la discusión tiene un retraso de dos años del gobierno foxista.
Con una administración que ha concluido, "difícilmente podremos hacer algo más que invocar irregularidades o cuestionar resultados", agregó el diputado del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
En la tribuna expuso que la revisión de dichas cuentas evidencian una larga serie de irregularidades cometidas por servidores públicos de diversas entidades públicas.
"A la fecha no han sido solventadas aún en su totalidad, ni tampoco se han concluido para todos los casos los procesos punitivos", aseveró.
Indicó que tan sólo en las Cuentas Públicas de 2002, 2003 y 2004 "las irregularidades detectadas ascienden a 164 mil 931 millones de pesos".
A su vez la diputada Beatriz Pages, del PRI, dijo que en el mandato de Fox se "dilapidaron" casi 700 mil millones de pesos de excedentes petroleros en gasto corriente, salarios y la creación de una élite burocrática.
"Fox, el hombre del cambio, la democracia y del progreso", llevó al país de 2001 a 2006 del lugar 48 que ocupábamos en competitividad, al sitio 55 a nivel mundial.
El diputado federal del PAN, Cristian Castaño Contreras, defendió el mandato foxista y aseguró que durante el mismo el país creció, a pesar de la oposición que se dedicó a obstruir y boicotear las reformas para la competitividad.
Acusó a los gobiernos priistas de ser perpetuadores de la pobreza y la ignominia, y los gobiernos emanados del PRD de estar vinculados con casos como el de René Bejarano, Ahumada, e incluso de dirigentes perredistas vinculados con el narcotráfico, como en Tamaulipas, recientemente.
