GB vacunará contra H1N1 desde octubre
El programa de vacunación contra la gripe H1N1 comenzará en octubre en Gran Bretaña, sujeto a las licencias de los reguladores sanitarios, dijo el jueves el jefe de salud Liam Donaldson.
La mayoría de vacunas suministradas por la farmacéutica GlaxoSmithKline, y un primer lote de 300,000 vacunas llegará este mes al país, con un total de 54.6 millones esperado para diciembre, agregó Donaldson.
"Estamos teniendo un menor suministro de Baxter que el que habíamos previsto, por lo que la mayoría de nuestras vacunas vendrá de Glaxo", precisó Donaldson a periodistas.
A comienzo de este mes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que esperaba que las primeras vacunas para combatir la influenza pandémica H1N1 estén listas para su uso en algunos países en septiembre.
Donaldson manifestó que los tratamientos necesitarían ser aprobados por los reguladores médicos europeos antes de que comience la campaña de vacunación.
"Esperamos que en octubre esté garantizada la entrega de la licencia, para poder administrar las primeras inyecciones de la vacuna", añadió el funcionario británico.
Si bien el ritmo de las nuevas infecciones de la popularmente llamada gripe porcina se desaceleró en Gran Bretaña en las últimas semanas y la mayoría de los casos muestran ser leves, los expertos en salud esperan un nuevo aumento de casos para fin de año.
La influenza H1N1 "está causando más muertes en las personas saludables que la gripe estacional", añadió Donaldson.
Los temores de que la cepa pueda volverse resistente al antiviral Tamiflu impulsaron la necesidad de contar rápidamente con vacunas en el mercado.
El Gobierno planea inmunizar a alrededor de 11 millones de personas consideradas en alto riesgo, ya que no espera contar con dosis suficientes para vacunar a toda la población antes de la llegada del invierno en el hemisferio norte.
Entre las primeras personas que se inmunizarán se encuentran 5 millones de mayores de 6 meses que actualmente integran grupos de riesgo, todas las embarazadas, los contactos de quienes tienen sistemas inmunes comprometidos y alrededor de 2 millones de trabajadores de la salud y la atención social.
Las personas saludables de más de 65 años no tendrán prioridad porque al parecer este grupo cuenta con una inmunidad natural al virus, indicó el Departamento de Salud británico.
