El Gobierno de facto suspendió temporalmente el toque de queda impuesto el lunes cuando se supo que el presidente depuesto Manuel Zelaya se encontraba en la capital de Honduras. "La emergencia se suspendió el miércoles por seis horas, de las 10 de la mañana a las 4 de la tarde", dijo el ministro de Información del Gobierno de facto, René Zepeda.
"En ese lapso, esperamos que los negocios abran para que el pueblo se abastezca de alimentos y atiendan sus necesidades básicas", añadió.
Zepeda indicó que después de las 4 de la tarde del miércoles, las garantías serán nuevamente suspendidas hasta el jueves.
Zelaya permanece desde inicios de semana en la embajada de Brasil de Tegucigalpa, en cuyos alrededores se congregaron miles de partidarios que fueron desalojados el martes con gases y balas de goma por las fuerzas de seguridad.
Choques entre seguidores del mandatario depuesto y uniformados fueron reportados por las autoridades en la tarde y noche del martes en Tegucigalpa.
El vocero de la Secretaría de Seguridad, el comisario Orlin Cerrato, indicó que un puesto policial y varios supermercados, negocios, restaurantes y bancos fueron saqueados durante la noche presuntamente por partidarios de Zelaya.