Migrantes conservan el “sueño americano”
A pesar de la crisis económica en Estados Unidos la diferencia salarial de ocho a uno con México sigue siendo un gran atractivo para que miles de campesinos y jornaleros busquen en el vecino país una oportunidad de empleo. La Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC) señaló lo anterior y detalló que en 2007 se captaron 26,000 millones de dólares por remesas; el año pasado 25,100 millones, y de enero a septiembre de 2009 se han logrado 16,400 millones de dólares.
En un estudio sobre la Migración de Campesinos a Estados Unidos considera que son varias las razones que hacen posible este fenómeno en el medio rural y la primera de ellas es el desequilibrio en el desarrollo regional.
Otra es la asimetría en el ingreso de familias en México, lo cual ha motivado que la "expulsión" de connacionales adquiriera las dimensiones que ha alcanzado, indicó la central.
Planteó que a ello se debe sumar la falta de capacidad para impulsar el desarrollo regional y el equilibrio en el ingreso nacional y sobre todo para la generación de fuentes de trabajo.
En el análisis se plantea que los nuevos demandantes de empleo serían 1.2 millones entre 2000 y 2005; de 1.1 millones en el lapso 2005-2010 y de poco menos de un millón en el de 2010-2015.
La CIOAC insiste en que el diferencial de salarios entre ambos países, que es de ocho a uno, sigue siendo el principal atractivo para migrar a Estados Unidos, a pesar de los momentos difíciles por los cuales atraviesa.
Planteó que el salario es una atracción "prácticamente irresistible para muchos trabajadores mexicanos" y que otro elemento a considerar es la situación de desigualdad y diferencias regionales que con mayor o menor intensidad abarcan todo México.
El fenómeno de la migración afecta casi la totalidad de las 32 entidades federativas, incluso ciudades habitualmente receptoras de migrantes nacionales se están convirtiendo a un ritmo ascendente en áreas expulsoras hacia Estados Unidos, como son los casos del Distrito Federal, de Guadalajara y Monterrey.
Aunque 56% de los migrantes antes de llegar a Estados Unidos vivía en alguna entidad de la región tradicional de migración a la Unión Americana, mencionó.
Por otro lado, agregó, entre los migrantes que más transfieren remesas sobresalen los del sureste y en menor medida el norte y el centro sur del país.
De los 2,350 municipios en 96.2% se advierte algún tipo de contacto con Estados Unidos, expresado a través de la migración hacia el vecino del norte y/o del retorno a México, así como mediante las transferencias monetarias desde aquel país.
Una de las razones por las cuales las zonas con más elevados índices de expulsión de migrantes es que no son favorecidas por las políticas públicas de infraestructura y de fomento económico.
La causa principal de este fenómeno, se puntualiza en el estudio, es que no existe un modelo de desarrollo rural y para la producción de alimentos que incluya a la gran mayoría de los pobladores del medio rural.