Los amantes del histórico Mustang tienen una nueva opción para “su” modelo. El ingeniero Paul Randle pensó y diseñó esta versión que, como lo dice su nombre, lleva un techo que esta formado por un segmento de cristal.
Esta azotea esta tratada acústicamente y lleva un laminado solar reflexivo que limita aumentos de temperaturas y conserva la tranquilidad interior.
El diseñador asegura que el control de clima dentro del vehículo y las propiedades acústicas mantienen el nivel de NVH (análisis de ruido, vibración y molestias) del modelo coupé básico.
La variante tiene un valor agregado de casi 2000 dólares más, sea en una versión Mustang Bullit con el motor V6 o en la Shelby GT500KR con el propulsor V8 de 5,4 litros.
La marca del ovalo le brinda una cambio más a este inmortal automóvil. No es un modelo propiamente dicho pero es una restyling más para el tan codiciado Ford Mustang.