Un viaje por las tradiciones
El occidente guarda en su interior algunos de los elementos más llamativos que logran atraer al turismo nacional e internacional. La capital del estado, Guadalajara, es poseedora de joyas arquitectónicas, gastronómicas y artísticas que la han posicionado como destino obligado.
Otro de los principales atractivos se encuentra a unos 60 kilómetros, lo único que se necesita es abordar el lujoso tren José Cuervo Express; una fiesta sobre las vías que incluye música mexicana, antojitos típicos, cocteles y todo el folclor que nos caracteriza.
El destino del recorrido es legendario; un lugar que ha posicionado a la región como una de las más productivas y famosa por dar nombre a la bebida nacional por excelencia, Tequila. Su denominación como pueblo mágico no es gratuita, un mérito fácilmente entendible al contemplar la majestuosidad del volcán y las pencas a sus faldas.
Una vez que los pies tocan el piso de este poblado, el deleite se vuelve una constante. Acorde de guitarras, calidez humana en sus habitantes, aroma a dulce agave cocido; así se podría describir un poco de lo mucho que tiene para ofrecer.
Hotel Solar de las Ánimas se convertirá en el hospedaje más acogedor, una antigua casa virreinal del siglo XVII que conserva altos muros y finos acabados, complementando con modernas actividades como golf y recorridos por el paisaje agavero.
Mención aparte merece la visita a la destilería más antigua de América Latina, Fábrica La Rojeña cuyas puertas se abrieron en 1758, que actualmente produce cerca de 50 mil litros diarios de destilado.
La mítica cava subterránea resguarda la mejor colección de tequila “Reserva de la Familia”, así como la colección de autos de la dinastía Cuervo. Aquí la cata profesional y maridaje ampliarán tu perspectiva sobre la historia y calidad en cada copa de tequila.
Esto es solo un poco de lo que conforma el llamado Mundo Cuervo, un espacio ideal para saborear la vida, con tintes muy mexicanos.