Tren Maya: el impacto en el desarrollo regional, urbano y turístico

Con una proyección para 2035, Mérida, Cancún y la Rivera Maya continuarán siendo los centros con mayor actividad económica y poblacional.
La ruta ferroviaria incluye el corredor Cancún-Tulum e integra más de 190 recursos turísticos.

Por Jorge Yarza, Socio Líder en la Industria de Construcción, Hotelería y Bienes Raíces en Deloitte México.

El Tren Maya es uno de los proyectos de inversión más relevantes del Plan Nacional de Turismo 2019-2024, con un impacto en cinco estados del Golfo de México (Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán).

El proyecto no es solo la construcción y operación del sistema ferroviario para la península de Yucatán, también involucra una estrategia para el desarrollo regional, económico y turístico de estas entidades, bajo una óptica integral y manera coordinada.

La ruta ferroviaria incluye el corredor turístico Cancún-Tulum e integra más de 190 recursos turísticos, con el objetivo de lograr una mayor derrama económica en beneficio de la población local.

De igual forma, se está incorporando a la oferta de turismo de sol y playa atributos complementarios ligados a la cultura, visitas a sitios arqueológicos y ecoturismo.

De acuerdo con el plan presentado por el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), la puesta en marcha del Tren Maya generará una nueva dinámica, creando oportunidades en el crecimiento regional y económico. Con ello, el gobierno federal espera crear zonas urbanas ordenadas en cada una de los polos de desarrollo, con visión regional.

Para conseguirlo se ha propuesto un esquema alineado con las vocaciones de las ciudades, que permita generar sinergias y potencialidades para los cinco estados.

La transformación requerirá una estrategia de largo plazo y un plan para cada uno de los proyectos integralmente planeados. Posteriormente, se trabajará en generar vehículos de inversión atractivos, y en los que confluyan recursos de diversas fuentes: públicos, de empresas privadas y de un amplio grupo de inversionistas particulares.

Es importante destacar el impacto que, potencialmente, tendrá el desarrollo de las ciudades y comunidades con una visión hacia el futuro en la región maya, llamaremos a este concepto “Desarrollo Urbano Región Maya”.

Además, es importante reflexionar sobre el significado de los “Desarrollos Urbanos Integralmente Planeados” para diferentes foros, personas y entidades.

Mientras que para algunos pueda ser sólo un frase, para el grupo que coordina Fonatur y las entidades federativas de la región, es la oportunidad clave para modificar tendencias y hacer ciudades más competitivas, de acuerdo con el planteamiento del Desarrollo Urbano Región Maya.

Aunque es necesario involucrar la participación activa de gobiernos, ciudadanos, visitantes y negocios, dentro de un ecosistema colaborativo e interconectado, con visión a largo plazo.

El objetivo es mejorar la calidad de vida de los habitantes y visitantes; optimizar e impulsar la competitividad económica para atraer inversión, empleo y talento; así como mejorar la conciencia colectiva enfocada en la sustentabilidad de comunidades, barrios y ciudades para lograr una gestión más eficiente de los recursos en el sistema.

En resumen, el Tren Maya permitirá aumentar y diversificar la conexión entre las localidades, al facilitar el acceso a los turistas a toda la región. Bajo esta premisa se puede atender y potenciar las ciudades pequeñas y medianas para:

  • Fomentar el desarrollo económico y un balance en la derrama de la riqueza entre los diferentes actores de la región
  • Favorecer el desarrollo de polos con menor grado de madurez, a partir de una estrategia de desarrollo territorial
  • Mejorar e impulsar la competitividad económica para atraer inversión, empleo y talento
  • Aumentar la conciencia colectiva enfocada en la sustentabilidad y lograr una gestión más eficiente de los recursos en el sistema

Las ciudades pueden verse beneficiadas de los Desarrollos Urbanos Integralmente Planeados, como un elemento fundamental para la atracción de inversión y empleo.

Así, estos elementos ayudarán a consolidar una agenda para el Desarrollo Urbano de la Región Maya, con una proyección para 2035 que permita la integración entre las entidades, haciéndolas más inclusivas, sustentables e inteligentes para mejorar la calidad de vida de muchos mexicanos.