Organizar la ubicación de tus empleados incrementa la rentabilidad de tu empresa
Invertir en capacitación, en recompensas e incentivos y elevar el salario emocional ya no son actividades suficientes para incrementar la productividad de los trabajadores.
El estudio ‘Planning Strategic Seating to Maximize Employee Performance’, elaborado por Cornerstone OnDemand, empresa que comercializa software para la gestión de capital humano, revela que asignar lugar a los empleados puede incrementar hasta 15% el desempeño organizacional. La compañía estadounidense evaluó durante dos años a 2,000 empleados para analizar cómo impacta en el rendimiento, para bien o para mal, la persona que uno tiene a un lado en el lugar de trabajo.
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Cómo sentar a los empleados
El informe de Cornerstone analiza que sentar a un empleado productivo –el que demuestra alto rendimiento– con uno de calidad –quien desempeña sus actividades a la perfección– eleva 13% la productividad y 17% la eficiencia.
En este sentido, Margarita Chico, directora general de Trabajando.com, plataforma de búsqueda de empleo, recomienda acomodar en un mismo espacio a los compañeros de área o equipo de trabajo, ya que así se impide que pierdan tiempo levantándose para realzar alguna consulta.
"Cuando es una empresa pequeña todos deben estar en el mismo piso, pero cuando la compañía es mediana o grande la sugerencia es tenerlos lo más cerca posible", expone la directora de Trabajando.com.
Agrega que el trabajador líder y positivo debe estar cerca de la oficina del jefe, ya que será más fácil transmitir mensajes al resto del equipo a través de él: "Este individuo es quien alienta al resto de colaboradores y trabajar de la mano con la autoridad inmediata facilita la comunicación de ideas y actividades motivadoras".
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Además, la reestructura debe responder a las actividades que realiza cada empleado en la compañía. Por ejemplo, las personas encargadas de servicio al cliente tienen que estar cerca de la entrada, los del departamento de sistemas deben ubicarse en una zona aislada, ya que necesitan un cierto nivel de concentración. Mientras que los colaboradores cercanos al jefe no deben alejarse mucho de su oficina.
Aunque hay que tener cuidado y justificar cada uno de los movimientos, puesto que hay trabajadores que se sienten ofendidos. “Hay que asegurarnos de que todos entiendan que acomodar al equipo es benéfico, así evitamos malos entendidos por favoritismos”.
¿Y los tóxicos?
Respecto a los empleados tóxicos, es decir, aquellos que no están conformes con las actividades en la oficina, el estudio de Cornerstore explica que juntar a dos colaboradores que siempre emiten comentarios negativos aumenta la posibilidad en 27% de que uno de ellos sea despedidos.
Por tal razón, Víctor Hugo Gallardo, académico del departamento de Ciencias Sociales y Negocios de la Universidad del Valle de México (UVM), dice que después de corroborar que su desempeño no es el adecuado, el jefe inmediato debe ponerles un ultimátum. “Primero hay que identificar las causas de su malestar, hablar con ellos y darles la oportunidad de cambiar su actitud. Hacerles sentir que tienen el respaldo de una autoridad en caso de no sentirse conformes con el trabajo diario”, expone el académico.
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En este proceso de prueba, para evitar el contagio de la apatía, la directora general de Trabajando.com explica que estos empleados deben estar ubicados en puestos individuales, muy cerca del encargado de área. De esta forma se aseguran de que va a cumplir las metas impuestas sin distracciones.
“Y si después de unos meses la mejora no es visible, lo ideal es prescindir de sus servicios”, sentencia el académico de la UVM.
Finalmente, Víctor Hugo Gallardo expone que lo ideal sería que los empleados roten en diferentes puestos geográficos para evitar el aburrimiento. De esta manera, asegura, el trabajador no se sume en la monotonía y mantiene sus niveles de productividad.