Cuando el líder pone el mal ejemplo
Francisco Orduña salió a dar la cara. Después de que Alonso Ancira, presidente del consejo de administración de Altos Hornos de México (AHMSA), fuera detenido en España por transacciones ilegales, el vocero y director corporativo de comunicación de la compañía siderúrgica se encargó de desmentir las acusaciones y aclarar la situación de la empresa.
Para Pilar Torres, directora del área de crisis de LLYC, las acciones de Orduña fueron adecuadas, ya que si bien hay que esperar a que se afirmen o desmientan los cargos en su contra, la empresa no puede poner en entredicho la reputación de su personal, mucho menos de su líder, ya que esto automáticamente mancharía la imagen de la compañía porque no evalúan previamente el perfil de sus colaboradores.
En este caso, la estrategia se tiene que operar en dos líneas: la legal y la de reputación. El director de Empower Business Solution asegura que aunque ambas tienen que ir alineadas, lo ideal es que la primera se queda exclusivamente en manos de los abogados. Mientras que la segunda sí compete a todos los directivos de la siderúrgica.
“La empresa tiene que decir la verdad. Esto es lo más difícil del proceso de contención, pero es necesario reconocer el fallo, porque al final se va a saber, entonces es mejor que la compañía lo asuma. AHMSA, hasta ahora, solo desmiente pero no acepta. Hacerlo, además, le daría tiempo de planear el siguiente paso, que es desarrollar una estrategia para corregir el daño y empezar de nuevo”, indica Sánchez.
Pasos a seguir
En la metodología tradicional del manejo de crisis hay tres etapas básicas que deben cumplirse:
1. Contener. Una vez que el problema se desata, no hay tiempo que perder. La compañía tiene que seleccionar un vocero que sea capaz de dar la cara ante el público y no dar oportunidad a que se generen las especulaciones.
2. Manejar. El vocero tiene que hablar con la verdad y hacer pública la posición de la empresa. Explicar cuál fue el problema, por qué los acusan y asumir responsabilidades, en caso de tenerlas.
3. Solucionar. Hubo afectaciones a terceros, entonces es necesario reparar los daños para que el mercado sepa que hay intención de recuperar la reputación.