Yvette Mucharraz, profesora del área de Dirección de Personal de IPADE Business School, y Francesco Venuti, director académico de la Maestría en Gestión Internacional de Alimentos y Bebidas (IFBM) y director académico del Executive MBA y GMP de ESCP Business School Campus Turín, afirman que en un mundo VUCA predomina la Volatilidad con la que se producen cambios de manera inesperada, tal es el caso de la COVID-19; la Incertidumbre, se da como la imposibilidad de conocer lo que va a suceder; la Complejidad se percibe en la manera que están interconectados los actores del sistema (países, mercados, clientes, proveedores y los virus); en tanto que la Ambigüedad se refiere a las relaciones de causa y efecto, que no son claras ni definidas, como las restricciones sanitarias y los incentivos al sistema económico.
En un entorno VUCA, un CEO deberá generar una agenda de trabajo que implique mayor eficiencia y productividad en la empresa requiere de los siguientes puntos clave:
Comunicación. La pandemia por COVID-19 forzó a las compañías a implementar nuevos esquemas, por lo que las juntas con los colaboradores ya no se efectuaron de manera presencial, sino virtual, lo cual ha mejorado el flujo de trabajo.
La comunicación debe atender a los aspectos de cada labor, pero también Elías González, profesor del Área de Dirección Financiera del IPADE Business School, apunta que los líderes de las empresas también deben ser transparentes y decirles a los empleados dónde está parada la empresa, porque 80% de las preocupaciones es compartido.
Objetivos. Para plantear los objetivos de una agenda de trabajo, lo mejor es hacerlo con los jefes de cada área de la organización, así se podrán delimitar los puntos sin pérdidas de tiempo en la ejecución.